Ciudad de México. Con el fin de reactivar el crédito para empresas y familias, el Banco de México (BdeM) determinó bajar la tasa de interés de referencia en medio punto porcentual para ubicarla en 5.5 por ciento anual.
Este movimiento se suma al recorte también de medio punto porcentual decidido durante su reunión extraordinaria de la Junta de Gobierno del BdeM del pasado 21 de abril.
En su anuncio de Política Monetaria, el BdeM informó que la actividad económica en México tuvo una importante contracción en el primer trimestre del año, la cual incorpora los efectos asociados a la pandemia en marzo que afectaron considerablemente a la producción de bienes y servicios.
Reconoció que pese a que aún se desconoce la magnitud y la duración de las afectaciones ocasionadas por la pandemia, se anticipa que éstas se profundicen en el segundo trimestre y den lugar a contracciones importantes en el empleo.
Los integrantes de la Junta de Gobierno del BdeM, que aprobaron el descenso en las tasas de interés por unanimidad, consideraron: “Los retos derivados de la pandemia para la conducción de la política monetaria incluyen tanto la afectación sin precedentes en la actividad económica como los asociados al choque financiero que enfrentamos”.
En cuanto a los riesgos para la trayectoria prevista de la inflación, a la baja destacan los efectos de la reducción en los precios de los energéticos.
Al alza, que la depreciación del tipo de cambio sea mayor o más persistente, así como posibles disrupciones en las cadenas de producción y distribución de algunos bienes y servicios, por lo que el balance de riesgos para la inflación se mantiene incierto.
Así, las expectativas para la inflación general de corto plazo han disminuido, mientras que las de mediano y largo plazos se han mantenido relativamente estables, si bien en niveles superiores a la meta de 3 por ciento.