Ciudad de México. Las modificaciones que de último momento decidió la Secretaría de Salud para postergar la entrada del sector automotriz al 1 de junio parará toda la industria en América del Norte, simplemente porque las plantas de Estados Unidos no tienen con qué trabajar si no reanuda actividades México, explicó Eduardo Solís, consultor internacional en comercio exterior, inversión y manufactura; y expresidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).
“No fue una fe de erratas. Se canceló” el acuerdo al que habían llegado la industria y la administración federal un día atrás, debido a “luchas de fuerza entre el tema de salud y el tema económico”, dijo el también integrante del Consejo Directivo de Confederación de Cámaras Industriales. Así que por el momento ninguna planta automotriz en México puede comenzar a producir.
Tras semanas de presiones por parte de la industria de Estados Unidos que anunció el regreso a operaciones el 18 de mayo, el gobierno mexicano hizo su parte en declaraciones el miércoles pasado. Se decretó como actividades esenciales a la construcción, la minería y la producción automotriz. Todo bajo un acuerdo en palabras que no se hizo oficial sino hasta el 14 de mayo en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
No obstante, ya en este documento, la Secretaría de Salud precisó que estas industrias no reiniciarían sino hasta el 1 de junio de 2020; mientras, del 18 al 31 de mayo “implementarán los lineamientos de seguridad sanitaria en el entorno laboral”. Fuentes del sector automotriz consultadas al respecto informaron que no estaban enteradas de tal precisión, sino hasta que la leyeron en el DOF.
“El haber dado marcha atrás de ayer a hoy es una señal muy mala (…) las contrapartes en Estados Unidos están nerviosas por lo publicado esta mañana”, recalcó Solís. Explicó que no hay manera de que las industrias de ese país muevan su proveduría en estos momentos, así que hasta el 1 de junio estará frenado todo el sector en América del Norte.
“Cancelar contratos me parece una palabra muy fuere, no es que tengan proveedores alternos en un momento tan crítico. Pero el tema es mucho más delicado, ellos no pueden abrir si nosotros no abrimos porque reciben 40 por ciento de partes y componentes de México”, subrayó.
Detalló en que se insistirá al gobierno en reabrir de manera simultánea con Estados Unidos y Canadá y hacerlo con un regreso escalonado. De cualquier manera, agregó Solís, no se puede volver a los niveles de producción previo a Covid-19 dado que la demanda también está deprimida.