De acuerdo con una encuesta elaborada por el Infonavit entre los trabajadores afiliados al IMSS, al inicio de mayo disminuyó ligeramente la percepción de que la economía es el principal problema que aqueja a su familia en comparación con principios de abril, aun así, sigue siendo superior dicha preocupación por arriba de la preocupación por la pandemia de Covid-19. A la vez, el temor por el desempleo aumentó y se coloca ahora como la segunda preocupación entre las familias mexicanas.
La encuesta elaborada por el Instituto de vivienda del 23 al 30 de abril pasados, muestra un incremento en el optimismo de que la economía familiar mejore a corto plazo, así como en las probabilidades de solicitar algún crédito ante el Infonavit. No obstante, la mayoría de los consultados consideran que su situación económica familiar empeorará en las próximas semanas.
Al cuestionarles cuál es su principal temor derivado del coronavirus, la crisis económica fue la principal respuesta con 62 por ciento en la encuesta de mayo, en comparación con el 48 por ciento que respondió en ese sentido a inicios de abril.
En sentido opuesto, la preocupación por la crisis de salud bajó del 23 por ciento en abril, a 13 por ciento en mayo; mientras que el 25 por ciento en mayo expresaron su preocupación por ambos factores por igual.
Respecto al principal problema que afecta a su familia, la preocupación por el aspecto económico bajó ligeramente del 41 por ciento en abril al 39 por ciento en mayo; pero aumentó la cantidad de personas que consideran como problema el desempleo en su familia al pasar del 13 al 19 por ciento, en tanto que 12 por ciento consideraron en mayo como problema el coronavirus en comparación con el 13 por ciento que lo consideraba en abril.
En cuanto a las expectativas en la economía familiar, mientras en abril, 27 por ciento consideró que mejoraría en las próximas dos semanas, para mayo se incrementó el optimismo al 37 por ciento; al mismo tiempo, mientras en abril, 54 por ciento consideró que su condición económica empeoraría en las siguientes dos semanas, para mayo, 45 por ciento mantiene esa expectativa.
“La previsión de reducir o posponer el pago del crédito hipotecario es la más baja de los rubros explorados, lo que habla de la importancia de la vivienda en la jerarquía de prioridades de gasto de los derechohabientes del Infonavit. En mayo, sólo 17 por ciento dijo verse en la necesidad de reducir o posponer el pago de su crédito hipotecario. Esta proporción contrasta con otros rubros como cuidado personal, alimentos, recreación, transporte y educación, categorías en las que entre 60 y 95 por ciento de los acreditados afirman haber reducido o pospuesto gastos”, agregó el Infonavit en un comunicado.
El instituto también registró un incremento en la disposición a solicitar un crédito al Infonavit, ya sea para adquirir vivienda o para remodelación y mejoramiento. En abril 19 por ciento dijo que “segura o probablemente” solicitaría un crédito en el corto plazo, mientras que en mayo la proporción incrementó a 29 por ciento. Ello “refleja que las expectativas negativas respecto al futuro comienzan a retroceder, aunque aún son superiores a las expectativas positivas”, indicó el Instituto de vivienda.
