Ciudad de México. Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) explicó en conferencia virtual que en cuanto a ventas mensuales al mayoreo del 2018 al 2020, que normalmente se colocan 39 mil vehículos pesados en el mercado interno, sin embargo, está estancado desde hace varios años, dijo.
Elizalde destacó que en promedio deberían colocarse en promedio unas 3,250 unidades al mes, y demostró que sólo en abril del 2020 se colocaron 893, mientras que en abril del 2019 se colocaron 3,865.
“Nuestros vehículos son un bien productivo, no un bien de lujo. La caída del 76.9% en abril nos exige una atención muy aguda a reforzar a nuestras empresas de autotransporte que no sólo están en la línea de fuego de la pandemia si no que son clave para la recuperación económica”, subrayó.
“Las variables en este factor está desde el robo en el autotransporte, que ha incrementado en las últimas semanas, la variable del tipo de cambio, que el impacto real lo veremos en los próximos meses, mayo será aún más complicado; el precio de los combustibles, internacionalmente ha bajado y en México no ha bajado en los niveles que ha bajado en otros países, pero la variable más crítica es la pandemia por COVID-19, que vemos reflejada en las 893 unidades colocadas”, explicó el Presidente de la Asociación.
Destacó que en EE.UU., todas las plantas en ya están abiertas, y si hubiera alguna que no sería por falta de insumos, incluso dijo que hubo Plantas de vehículos pesados que nunca cerraron, “esto es importante para nosotros porque es la parte de la integración que se tiene en la cadena de suministro y el hecho de que en Canadá y EE.UU es claramente esencial toda la cadena de valor que va desde las autopartes, producción de vehículos pesados, los carroceros hasta os distribuidores que colocan el vehículo pesado con los transportistas, todo está operando”.
Dijo que es de suma importancia no dejar que EE.UU busque otros países como alternativas y que México no sea tomado en cuenta, pues ocasionará pérdidas de empleos y un debilitamiento del país en el mercado regional y mundial.
Acentuó que se debe mantener la cadena de valor que nos permita avanzar en el T-MEC.
Elizalde Lizárraga enfatizó que hoy están listos para la reapertura de la industria automotriz, pues la producción de vehículos tanto de autotransporte de carga y pasaje, atienden a todas las actividades económicas de Canadá, EE.UU., y México.
“Por convicción, estamos comprometidos como industria a cumplir con las máximas exigencias nacionales, internacionales y corporativas. Nada es más importante que la salud de nuestros colaboradores y sus familias”, dijo Elizalde, quien destacó 3 acciones de compromiso:
- Respaldo a los transportistas.
- Colaboración con la Industria de la Salud. Cada asociado revisará sus programas sociales para reorientar a la atención sanitaria de las comunidades donde operan.
- Apoyo psico-emocional a los colaboradores de las plantas y sus familias.
Finalmente, Elizalde Lizárraga expuso que la industria de vehículos pesados en EE.UU., sigue trabajando y si no abastecemos de autopartes o vehículos, van a buscar opciones y afectará severamente a México. “Decidir entre el 13 de mayo o el 18 de mayo, será la diferencia para salvar cientos de miles de empleos. Hoy estamos listos para la reapertura”.