En México hacen falta alrededor de 350 mil enfermeras y enfermeros para cubrir el déficit generado por la pandemia del Covid-19 y estar en condiciones de atender a los afectados, afirmó Rosa Amarilis Zárate Grajales, directora de la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia (ENEO) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Dijo que en una población de más de 120 millones de personas, actualmente hay cerca de 2.4 de estos profesionales de la salud por cada mil habitantes, cuando deberíamos tener por lo menos 4.4 de estos especialistas. En el país apenas hay alrededor de 315 mil enfermeras y enfermeros.
Zárate Grajales indicó que anualmente egresan a nivel nacional 20 mil estudiantes de enfermería, de los cuales mil 200 son de la UNAM. En esta casa de estudios es una de las 10 carreras con alta demanda, que se ofrece en la ENEO y la Facultad de Estudios Superiores de Zaragoza e Iztacala.
Previo a la conmemoración al Día Internacional de la Enfermera, este martes 12 de mayo, con el lema “Llevando al mundo hacia la salud”, la especialista señaló que cuando Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el 2020 como prime Año Internacional del Personal de Enfermería y de Partería, nadie se imaginó que enfrentarían el reto vocacional que significa esta pandemia.
Asimismo, refirió que de acuerdo con los registros de la Secretaría de Salud, entre 40 y 50 por ciento de las enfermeras cuentan con título y cédula de licenciatura, y el resto pertenece al sistema educativo técnico; son menos, en cambio, las que han obtenido una maestría o un doctorado.
“En nuestro país, el personal de enfermería ocupa cerca del 50 por ciento del total de los trabajadores del sistema de salud; en el mundo representan el 59 por ciento”, agregó la directora de la ENEO.
El 2020 fue declarado como Año Internacional del Personal de Enfermería y de Partería por marcar el bicentenario del nacimiento de Florence Nightingale, la fundadora de la enfermería moderna. Ella consiguió, en el siglo XIX que los enfermos estuvieran atendidos las 24 horas. Fue matemática y utilizó la información que recopilaba para analizarla estadisticamente, señaló la UNAM en un comunicado.
Realizaba rondas a la luz de un candil, por lo que la llamaron “La dama de la lámpara”. Resumió en cinco puntos sus mejoras en higiene y cuidado sanitario para asegurar la salubridad: aire puro, agua pura, desagües eficaces, luz y limpieza, sobre todo de manos.