Ciudad de México. En la Basílica de Guadalupe, en una misa a puerta cerrada, el arzobispo primado de México, Carlos Aguiar Retes, oró por las madres mexicanas y reconoció la importancia que tienen en la Iglesia católica al ser las “primeras evangelizadoras”, quienes transmiten la fe a sus hijos.
En tanto, en la editorial del semanario de la Arquidiócesis de México -su órgano de difusión-, la Iglesia que encabeza el cardenal Aguiar Retes expuso que ser mujer “es mucho más que constituir la mitad del género humano, y encierra una tarea que va más allá de la obtención o reconocimiento de derechos, así como de la exigencia de paridades de género o de luchas emancipadoras”.
Destacó que “es clara la unidad y complementación entre el hombre y la mujer, y por eso seguimos en deuda histórica, cultural y secular ante quien tiene una vocación tan sublime como la maternidad”.
Por otra parte, como parte de su homilía pronunciada en el templo Mariano, el cardenal Aguiar Retes dijo que “cuando no se descubre esta vida en relación con la vida eterna, el ser humano busca la felicidad pero no la encuentra, ni en el dinero, ni en el poder, ni en el placer; siempre aparece el deseo de algo más que no ha descubierto, una ansiedad que crece y que trata de satisfacerla, para lo cual se deja conducir por los instintos, las pasiones y tendencias corporales; pero siempre se queda peor que antes y se origina la adicción”.
Indicó que este dinamismo genera en la sociedad el estilo creciente “de una vida superficial, estresante, cuyo derrotero está llevando a muchos a vivir un individualismo egoísta y estéril, que perjudica a él mismo y a quienes entran en relación con él”.