Ciudad de México. Organizaciones campesinas agrupadas en El Campo es de Todos y sindicatos independientes, trabajan en el establecimiento de una alianza en contra del aumento de los precios de los productos de la canasta básica bajo el “pretexto del Covid-19, pues la afectación en la cadena de abasto se nota de origen, desde los campesinos y productores hasta el consumidor final”.
La intención de las organizaciones de agricultores, sindicales y sociedad es evitar que se rompa la cadena de producción, distribución y comercialización de alimentos con el cierre de mercados públicos, anunció Isidro Pedraza Chávez, presidente de la Unidad de la Fuerza Indígena y Campesina (UFIC) e integrante de la dirigencia de El Campo es de Todos.
Al participar en el Foro virtual La crisis sanitaria por el Covid-19 y la económica, el dirigente de la UFIC dijo que actualmente, tan sólo en la Ciudad de México, entre 15 y 20 mercados públicos están cerrados total o parcialmente al igual que diversas bodegas en la Central de Abasto derivado de la pandemia.
Detalló que “en la alcaldía Venustiano Carranza se han cerrado los mercados Sonora, Sonora Anexo, Merced Flores, Merced Dulces, Merced Anexo, Merced Paso a Desnivel, Central de Calzado, Nuevo San Lázaro y Emilio Carranza, que no venden productos esenciales, además del mercado Jamaica, este temporalmente”.
Añadió que en la Central de Abasto en unas semanas la afluencia bajó entre “60 y 70 por ciento” y, con ello, la caída en la distribución de alimentos básicos podría “afectarse gravemente pues hay una afluencia diaria de 590 mil personas, y si la emergencia sanitaria se prolonga se rompería la cadena de distribución de alimentos frescos”.
Además, denunció que “intermediarios se han apoderado del mercado imponiendo alza en precios de alimentos lo que ha golpeado la economía del consumidor”.
En la última semana de abril el comportamiento de precios en alimentos ha sido al alza. El huevo en granja se ubica “en el mejor de los casos en 40 pesos el kilo el blanco y el rojo a 45 pesos”.
“El frijol negro está a 40 pesos el kilogramo debido a una cosecha escasa y a la alta demanda y el kilogramo de jitomate se ubica en 50 pesos, el limón entre 35 y 40 pesos el kilogramo, el ajo a 40 pesos, cebolla a 35 pesos, tomate verde 30 pesos”.