Madrid. El entusiasmo por el regreso del futbol en España no mitiga un sentimiento real de temor entre algunos de sus actores. Los jugadores y el cuerpo técnico del Eibar reconocieron que hay miedo ante el regreso a la actividad en la Liga, ya que no podrán cumplir la primera recomendación de todos los expertos, esto es, el distanciamiento físico para evitar nuevos contagios de coronavirus.

Ese miedo genuino es por el riesgo de contribuir a un nuevo brote de la epidemia, así como a las terribles consecuencias que ello conllevaría para toda la población, dijeron los integrantes del club. Las autoridades sanitarias mundiales recomiendan como primera medida de protección mantener una distancia de entre 1.5 y 2 metros entre las personas para evitar la propagación del coronavirus contenido en las partículas de saliva.

Nos inquieta que, por hacer lo que más nos gusta, podamos contagiarnos, infectar a nuestros familiares y amigos, e incluso contribuir a un nuevo brote de la epidemia, con las terribles consecuencias que ello conllevaría para toda la población, advirtieron jugadores y técnicos en un comunicado conjunto.

En este sentido, remarcaron que lo primero que debe preservarse es “la salud de todos" y que es el “momento de que esa idea prevalezca con hechos, no únicamente con palabras.

Sólo con esa premisa clara tendría sentido volver a la competición. Pedimos garantías. Exigimos responsabilidad, reclamaron, añadiendo que jugar a puerta cerrada es otra medida que no les agrada.

Los jugadores del Eibar muestran sus reticencias en la semana en que el gobierno autorizó la apertu-ra de entrenamientos individuales de deportistas y las prácticas básicas de ligas profesionales.

La mayoría de clubes están aprovechando para someter a pruebas de coronavirus a sus plantillas.

El futbol nos apasiona y nada nos hace más ilusión que poder volver y hacer disfrutar a la gente. Sin el futbol nos sentimos vacíos, como lamentablemente estarán nuestras gradas. Defendemos un escudo que representa a miles de personas y nada será igual sin ellos. El espectáculo pierde su esencia, expusieron.

Además, jugadores y técnicos del club armero aclararon que se sienten privilegiados por contar con trabajos como los que desarrollan, pero advirtieron que antes de futbolistas son personas y, al igual que en toda la sociedad, les preocupa la situación sanitaria.

La preocupación de los jugadores tuvo eco en el ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, quién afirmó que comprendía ese temor.

¿Cómo no voy a entender la preocupación de los jugadores de futbol? Por supuesto. Es la que tiene este gobierno, la prioridad es el derecho a la salud, a la vida, dijo Uribes.

Todo va a depender de que se den las condiciones para que no se ponga en riesgo esa garantía a la vida, añadió el ministro.

Mientras tanto, el futbol alemán sólo espera la luz verde gubernamental este miércoles, cuando las autoridades políticas decidirán si autorizan o no la reanudación de la Bundesliga, a puerta cerrada y sobre la base de un protocolo sanitario draconiano, que daría inicio tentativamente a mediados de mayo.

Alemania sería de este modo el primer campeonato importante en volver a disputarse desde el parón del deporte a mediados de marzo debido al coronavirus.