Ciudad de México. El “modelo centinela” con el que la Secretaría de Salud estima la prevalencia del Covid-19 en México no está arrojando las cifras reales de la epidemia, por lo que “no sabemos en qué lugares del país y sectores de la población se está escondiendo el virus”, de acuerdo integrantes de la Comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia del Coronavirus, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Malaquías López, profesor de la Facultad de Medicina (FM), dijo este martes en una conferencia de prensa virtual que “sin números reales, el panorama es muy incierto y no podemos hacer predicciones concretas” sobre el fin de la crisis, ni sobre el momento en el que se dará el mayor número de los contagios.
Desde el inicio de la pandemia las autoridades indicaron que su estrategia estaría orientada a mitigar la dispersión del virus, no a contenerla. “Si tuviéramos información para saber dónde y quién está siendo afectado por la infección en cada momento, podríamos imaginar medidas más orientadas a la contención. Pero en el escenario actual, como no sabemos quiénes son, ni dónde están las personas infectadas, ni cuál es la velocidad de dispersión que está teniendo la enfermedad en la comunidad, lo que podemos hacer se limita a prepararnos para dar atención de los casos graves de Covid-19, es decir, lo que ahora se discute tanto, cuántos respiradores hay, si hay personal médico suficientemente preparado para dar atención a todos los enfermos”, mencionó.
En México, a diferencia de otros países, dado que las autoridades han optado por sólo realizar la prueba de Covid-19 a los pacientes que tienen síntomas como la insuficiencia respiratoria, es decir, a los casos graves, “prácticamente no se están contando los casos leves”, explicó.
“El verdadero número de casos en México es materia de discusión”. Consideró que quizás se están detectando el 5 por ciento de los casos, que serían los más graves. “El número mínimo de casos, según los datos disponibles, sería de ocho veces más los casos confirmados oficialmente, según el modelo centinela de la SSa, y el número máximo podría estar en hasta 25 más de lo que arrojan las cuentas oficiales”, dijo.
Samuel Ponce de León, coordinador de comisión, agregó que hasta ahora la respuesta de las autoridades ante la enfermedad “ha sido efectiva” y hoy la curva de infectados no tiene el crecimiento pronosticado por múltiples personajes de la sociedad mexicana.
La pandemia de Covid-19 está lejos de terminar, por lo que naciones como México deben revalorar sus prioridades y necesidades, invertir en ciencia e innovación, redefinir sus sistemas económicos, ser productores y estar a la cabeza en el acceso a vacunas y antivirales, comentó.
Mauricio Rodríguez Álvarez, vocero de la Comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia del Coronavirus, resaltó que no es la primera vez que la UNAM participa en una situación compleja, “han sido varias y de diferente intensidad, y en los últimos días hemos corroborado la importancia de esta institución en tiempos de crisis”.
William Lee Alardín, coordinador de la Investigación Científica de la UNAM, subrayó que la institución se ha enfocado en esta emergencia en soluciones que van desde la realización de pruebas, optimización de las mismas, atención a la comunidad y apoyo a instituciones de salud.
La UNAM también ha centrado sus conocimientos en el diseño e implementación de mascarillas y termómetros; reparación de insumos como ventiladores; monitoreo del medio ambiente; revisión de los niveles de contaminación, sistemas de datos y vulnerabilidad, además de hacer recomendaciones para contribuir a la protección de la población, avanzar contra el virus y contender mejor con esta situación.
El también experto del Instituto de Astronomía destacó que no podemos pretender que si seguimos haciendo lo mismo, obtendremos resultados diferentes. “Debemos tomar medidas de prevención y mitigación, reordenar prioridades y pensar a largo plazo para estar en mejores condiciones”.
Carlos Arias Ortiz, investigador del Instituto de Biotecnología (IBt), señaló que la UNAM trabaja de forma permanente en la secuenciación del genoma de variantes genéticas del virus SARS-CoV-2 presentes en la población mexicana, con apoyo de especialistas del INDRE, INER, Instituto Nacional de Nutrición y la Universidad de Oxford.
Precisó que este proyecto permite identificar las mutaciones en el genoma del virus, que lo pueden hacer resistente a fármacos, además de vigilar las cepas que circulan en el país.
Yolanda López Vidal, de la Unidad Clínica de Diagnóstico de Coronavirus para la Comunidad Universitaria, que brinda atención a académicos, estudiantes y trabajadores administrativos, reportó que hasta el 15 de abril habían atendido a 620 pacientes, 57 por ciento mujeres y 43 por ciento hombres, con edad promedio de 32 años.