Ciudad de México. La pandemia de Covid-19 ha hecho aún más vulnerables a sectores que de por sí lo eran, como migrantes, personas privadas de la libertad y familiares de víctimas de desaparición, en un entorno al cual ahora se suman las agresiones contra el personal sanitario que combate a la enfermedad, advirtió el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Durante la presentación de su “Informe anual México/América Central 2020”, el organismo advirtió que la violencia en el mundo no se ha detenido por el surgimiento del coronavirus, por lo que la pandemia se suma a los múltiples casos de asesinato, desplazamiento, desaparición forzada y agresiones sexuales que siguen ocurriendo en la región.
Jordi Raich, jefe de la delegación regional del CICR para México y América Central, afirmó en conferencia de prensa vía Skype que, si bien la pandemia ha demostrado que todas las personas son vulnerables a la enfermedad, hay sectores y personas “ultravulnerables” que se han visto particularmente afectadas por la emergencia sanitaria.
Uno de los grupos que generan más preocupación son los migrantes, pues muchos de ellos siguen siendo deportados desde Estados Unidos y México en condiciones inadecuadas de higiene, a pesar de que en esta época se recomienda no movilizarse a menos que sea indispensable.
Por otro lado, el especialista llamó la atención sobre la gravedad de la situación de las cárceles, en las cuales suele haber hacinamiento y falta de higiene, por lo que insistió en que las autoridades se apresuren a liberar a personas especialmente vulnerables ante el Covid-19, pues aunque la situación todavía “no es explosiva, sí es tremendamente preocupante”.
En ese sentido, Raich estimó que la puesta en libertad de internos puede hacerse a través de leyes de amnistía, como la aprobada recientemente en México, pero también mediante otras herramientas legales para agilizar el proceso de excarcelación.
A dicho escenario, de por sí complejo, se añade ahora el tema de las agresiones contra el personal sanitario que atiende a los pacientes de Covid-19, las cuales fueron calificadas por el especialista como inaceptables, más aun cuando son los médicos y enfermeras quienes pueden salvar la vida de quienes en algún momento los agreden.
“Es inconcebible que se ataque al personal sanitario. Ellos son los verdaderos héroes que arriesgan no sólo su vida y su salud, sino también la de sus familias, y son las primeras personas a las que acudiremos (en caso de estar enfermos), por eso es inconcebible que se les esté atacando, porque su labor es vital en todo el planeta”, enfatizó.
Por su parte, Martienus De Boer, jefe adjunto de la delegación regional del CICR para México y América Central, advirtió que las agresiones contra médicos y enfermeras es un fenómeno que ocurre también en otras partes del mundo, generada por la idea errónea de que son posibles agentes de contagio.
En el caso de México, señalo, el CICR ya trabaja con las autoridades de las secretarías de Salud y Relaciones Exteriores y el Instituto Mexicano del Seguro Social para buscar formas de proteger al personal sanitario, cuyos integrantes muchas veces han sido agredidos por portar su uniforme en la vía pública.