Ciudad de México. Las 10 medidas anunciadas por el Banco de México (BdeM) orientadas a brindar mayor liquidez cambiaria y a fortalecer el sistema financiero, guardan una estrecha relación entre sí, lo que impulsará la actividad económica al generar mayor producción de las empresas, lo que ayudará a reducir los despidos, a bajar los niveles de impago y a aumentar el consumo, explicó Sofía Santoscoy, analista bursátil y económica de Bursamétrica.
La especialista de la casa de bolsa recordó que hoy en día México está inmerso en un contexto de crisis de consumo como consecuencia de las fuertes medidas de aislamiento que se han generado en la mayoría de los países para contener la propagación de la pandemia de Covid-19.
Dicha situación, dijo, ha provocado que se reduzca el dinero disponible para consumir y/o adquirir bienes o servicios, o bien, para invertir o producir por parte de las empresas, ya que muchos sectores económicos han parado al no ser considerados esenciales.
“En México hemos visto cómo dicha situación ha provocado una contracción del consumo ante los cierres o los despidos debido a la falta de recursos por parte del sector empresarial, principalmente. Hasta el momento los apoyos del gobierno han sido insuficientes”, señaló.
Antes este escenario, apuntó, el banco central decidió reaccionar con 10 medidas concretas que buscan elevar la liquidez (dinero disponible) en el mercado nacional. (https://bit.ly/2Vrnm5u)
Explicó que diariamente se realizan compensaciones entre las instituciones financieras para evitar desbalances, es decir, se trata de una contabilidad para revisar cuánto entra y cuánto sale, buscando que no haya más dinero de lo que se guardó y viceversa.
Cuando se genera dinero de más, este excedente se retira, “lo que se le conoce como esterilización”. Normalmente, si las cantidades son pequeñas se guardan en instrumentos de corto plazo, pero cuando son muy grandes, los excedentes van a Depósitos de Regulación Monetaria (DRM) a plazos más largos.
“En otras palabras, los bancos introducen su excedente monetario a una cuenta dentro de Banco de México”, explicó Santoscoy.
Una de las principales medidas, dijo la especialista, es que en esta ocasión el BdeM autorizó disminuir el monto que deben tener los bancos dentro de esa cuenta para que ese dinero pueda ser usado para financiar a las empresas y personas físicas. “Es dar liquidez para otorgar crédito”.
Adicionalmente, explicó, otra de las medidas es nuevas facilidades de financiamiento temporales a empresas que emiten deuda bursátil, para que el financiamiento se canalice a las micro, pequeñas y medianas empresas.
Por el contrario, añadió, si a algún banco le falta dinero se realiza, entre comillas, un préstamo del BdeM, con facilidades. Al mismo tiempo, si las instituciones financieras que poseen activos gubernamentales que no han tenido bursatilidad y necesitan la liquidez, podrán intercambiar temporalmente con el banco central.
Otro punto importante, indicó, es que realizará permutas (intercambios) de papeles gubernamentales de mayor plazo (más de 10 años) a cambio de los de menor plazo (vencimientos hasta de tres años).
También destacó el hecho de que podrá realizarse el programa de coberturas cambiarias con contrapartes no domiciliadas en el país, permitiendo que la moneda nacional opere más estable durante horarios en los que no está abierto el mercado mexicano, lo que reducirá su depreciación.