Ciudad de México. Sólo en abril el número de empleos que pueden perderse será de 600 mil, estimó la industria del país, sector que no se niega a mantener los puestos de trabajo actuales, pero considera imposible que el gobierno lo obligue a seguir pagando salarios a sus trabajadores por la falta de ingresos como consecuencia de la pandemia del coronavirus.
En el segundo informe de afectaciones por el Covid-19, Alejandro Malagón, vicepresidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), señaló que si durante marzo el promedio de pérdida de puestos laborales fue de 13 mil diarios, según las cifras publicadas por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), para el cuarto mes del año la tendencia será de 20 mil diarios.
Lo anterior significa que abril terminaría con la pérdida de alrededor de 600 mil empleos, consideró Jose Luis de la Cruz, presidente de la Comisión de Estudios Económicos del organismo empresarial.
De la Cruz comentó que la caída de la industria en Estados Unidos ha incidido en el comportamiento del sector en México, es decir, el debilitamiento del sector secundario continuará en los meses que dure la pandemia del Covid-19.
Explicó que hasta febrero pasado —previo al primer caso registrado de coronavirus en el país—, la capacidad instalada de la manufactura ya mostraba una tendencia a la baja, por lo que en marzo se prevé que se exacerbe esa contracción.
Señaló que si las medidas que han paralizado a siete de cada 10 industrias perduran hasta el 15 de mayo próximo, el producto interno bruto del sector para este año terminará con una contracción de 7.2 por ciento, lo cual implicaría una perdida de 500 millones de pesos, por lo que si se amplían las medidas, el costo será mas alto.
Sostuvo que el sector industrial será la única vía para impulsar la economía del país, ya que vinculará a otros mercados y dará empleo, pues en el contexto actual los ingresos petroleros de México serán más bajos de lo que se tenía contemplado.
Malagón subrayó que un sondeo realizado a empresas muestra que nueve de cada 10 de los sectores ha tenido una baja en las ventas, es decir, a la liquidez para continuar operando.
Subrayó que 50.2 por ciento de las empresa han mantenido a todos sus empleados, mientras que 48.7 por ciento se han visto en la necesidad de disminuir su plantilla. Solo 1 por ciento ha tenido que incrementar el empleo.
Al referirse a mantener los puestos de trabajo, Raul Picard, vicepresidente de Concamin, dijo que “el empresario no puede estar obligado a lo imposible”.
“Cualquier empresario está en su derecho a liquidar conforme a la ley a cualquier persona que no pueda mantener”, apuntó. Sin embargo, destacó que se trata de ayudar a las empresas y conservar empleos. “Ojalá que pudiéramos ayudar a nuestros empleados, a nuestros empresarios”, insistió.
Alejandro Malagón señaló que hasta el momento no han llegado las ayudas por 25 mil pesos a las micro industrias.