La Haya. Sólo requirió unos cuantos golpes con un mazo y el valioso cuadro de Vincent van Gogh había sido robado.
Un programa de TV holandés sobre delincuencia y crimen transmitió imágenes de cámaras de seguridad que muestran cómo un ladrón de arte quebró puertas de vidrio reforzadas en un museo la madrugada del 30 de marzo, y salió por la tienda de regalos con una pintura de Van Gogh bajo el brazo derecho y un mazo en la mano izquierda.
La policía espera que publicitar las imágenes ayude a rastrear al ladrón que se llevó El jardín de la casa parroquial en Nuenen en la primavera (1884) de Van Gogh del museo Singer Laren mientras éste estaba cerrado por la pandemia del coronavirus.
Nadie ha sido arrestado y la pintura, que estaba en préstamo de otro museo holandés, el Groninger, cuando fue robada, continúa desaparecida.
La policía retuvo otras imágenes del interior del museo en Laren, un poblado al este de Ámsterdam, para proteger su investigación. Tampoco publicó un video tomado desde afuera del ladrón saliendo del museo.
El director del Singer Laren, Evert van Os, dijo en un comunicado que las imágenes no mostraban el robo completo y defendió su sistema de seguridad, que dijo que había sido aprobado por la compañía de seguros del museo.
“El ladrón atravesó un número de puertas y varias capas de seguridad que habían sido aprobadas por expertos”, dijo Van Os. “El video publicado no permite sacar ninguna conclusión en cuanto a la calidad de la seguridad del Singer Laren”.
La policía dijo el miércoles que había recibido 56 pistas nuevas del público como resultado del programa. También dijo que no está claro si el ladrón actuó solo. La policía también busca información sobre una van blanca que se ve pasando junto al museo en el video.
El óleo sobre papel de 25 por 57 centímetros (10 por 22 pulgadas) muestra a una persona parada en un jardín rodeado de árboles, con la torre de una iglesia al fondo.
“Parece que se enfocaron muy deliberadamente en esta pintura particular de Van Gogh”, dijo la vocera de la policía Maren Wonder al programa de Opsporing Verzocht que se transmitió el martes por la noche.
El cuadro data de una época en que el artista se había mudado de vuelta con su familia a un área rural de Holanda y pintaba escenas de la vida local, incluyendo la famosa obra “Los comedores de patatas”, en tonos mayormente sombríos.
Wonder dijo que los investigadores querían escuchar de cualquier testigo potencial que haya visto al ladrón afuera del museo en una motocicleta. También quiere que los visitantes envíen a la policía cualquier foto o video que hayan tomado en el museo los días previos al cierre, para ver si alguien estuvo estudiando el museo antes del robo.
“La gente puede ayudar si ahora se percata de que otro visitante se estaba comportando de manera sospechosa”, dijo. “Sería muy útil si los visitantes al museo tienen fotos o video en los que aparezcan otras personas”.
Van Os dijo que el museo aprenderá una lección del robo. Sin embargo, agregó que “en este momento lo único que importa es que el video debe proveer datos útiles y que la pintura debe regresar sin daños al Museo Groninger lo antes posible”.