Ciudad de México. El Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo (CDHNL) denunció que a inicios de este mes ocurrió un nuevo caso de probable ejecución extrajudicial en dicha ciudad del estado de Tamaulipas, en la cual habrían participado elementos del Ejército mexicano, y que forma parte de una larga serie de agresiones en las que se han visto involucradas las Fuerzas Armadas en años recientes.

A través de un comunicado, la organización civil indicó que la víctima de este caso es Eleazar David Ramírez Vázquez, quien al mediodía del pasado 6 de abril fue asesinado por militares cuando circulaba en su vehículo por el fraccionamiento Valles del Paraíso, de acuerdo con familiares de la víctima y un testigo que sobrevivió a los hechos.

“Nosotros andábamos dando la vuelta por el fraccionamiento cuando una unidad del Ejército comenzó a dispararnos. Lo único que hicimos fue bajar del carro y correr hacia el monto para protegernos de los balazos”, declaró el testigo, quien acompañaba a Ramírez Vázquez ese día.

De acuerdo con el CDHNL, la víctima fue trasladada al Hospital General de Nuevo Laredo alrededor de las 13 horas del mismo lunes 6 de abril con una herida de fuego en el costado izquierdo, pero después de unos minutos el hombre perdió la vida.

Al momento de su asesinato, Vázquez tenía 27 años, estaba casado, era padre de cuatro menores de edad y se dedicaba a la venta de carbón. De acuerdo con su familia, los militares presentes en el lugar de su muerte le negaron los primeros auxilios y le robaron sus pertenencias.

La organización civil indicó que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos ya abrió un expediente de queja por este caso de presunta ejecución extrajudicial y resaltó que se trata del segundo episodio de este tipo en menos de un mes en Nuevo Laredo, ya que el pasado 26 de marzo perdió la vida el ingeniero Francisco Javier La Fuente de la Rosa, atacado en la colonia Jardín por elementos de Fuerzas Especiales del Ejército.

A dichos casos se suman también los asesinatos de Juan Daniel Ortiz Martínez, ocurrida el 8 de febrero en el municipio de Río Bravo, y el de ocho supuestos delincuentes, el cual tuvo lugar el 5 de septiembre de 2019 en el fraccionamiento Valles de Anáhuac. En este caso, de acuerdo con el CDHNL, los militares alteraron la escena del crimen para fingir que hubo un intercambio de disparos.