El Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó esta tarde la solicitud del partido Morena para que se le reduzca el 50 por ciento de sus prerrogativas a partir de mayo y hasta que concluya el año, a fin de que esos recursos se destinen al sector salud.
Con ello, esta fuerza política dejará de recibir 826 millones de pesos, los cuales serán regresados por el INE a la Tesorería de la Federación. Hasta la fecha sólo el Partido del Trabajo ha anunciado que también renunciará a parte de su financiamiento público.
En sesión virtual, las representaciones de PRI y PRD se manifestaron por regresar parte de su financiamiento pero que este sea manejado en un fideicomiso que quede en manos del INE, mientras el PAN insistió en que el gobierno federal debe suspender sus proyectos de la Refinería de Dos Bocas, el Aeropuerto de Santa Lucia y el Tren Maya, para que se puedan tener recursos para enfrentar la contingencia.
El consejero Ciro Muyarama señaló que el órgano electoral no tiene facultades para manejar fideicomisos.
Lorenzo Córdova, consejero presidente del INE, reconoció que es generoso el financiamiento público que se da a las fuerzas políticas y estimó que vale la pena, con objetividad y sin intencionalidades políticas, discutir y analizar la pertinencia de racionalizar los montos que se dedican a la política, pero esa debe ser una discusión que parta de bases objetivas y no de intencionalidades políticas.