Morelia, Mich., 12 de abril.-La secta conocida como Nueva Jerusalén (municipio de Turicato), fundada hace casi medio siglo, ha realizado actividades religiosas masivas de Semana Santa, sin prevención alguna de la pandemia, señalaron autoridades municipales y de salud del estado de Michoacán.
Son aproximadamente tres mil habitantes, que de alguna manera han vivido en encierro durante décadas, sin embargo, permanentemente reciben peregrinos de estados como Chiapas, Oaxaca, Puebla, Estado de México y Michoacán, que visitan la capilla de la Virgen del Rosario.
La población asentada en las inmediaciones del pueblo cañero de Puruarán, construyó una barda alrededor de todo el pueblo, y en diferentes momentos tuvo gente armada en la entrada de acceso.
La secretaria de Salud del estado, Diana Carpio ordenó la instalación de filtros sanitarios en la carretera de acceso, sobre todo la que comunica con Tacámbaro.
Desde el inicio, la Nueva Jerusalén decidió no aceptar ninguna autoridad ni dependencia gubernamental, incluyendo a la de salud. Las mujeres mantienen la cabeza cubierta y visten túnicas de colores. Mientras que los hombres usan ropa normal, pero todos llevan en el cuello un escapulario.
Cabe señalar que la comunidad religiosa se dividió por el escándalo que se dio por abusos y violaciones a menores de edad, luego de la muerte de Papá Nabor, ocurrida a principios de 2008. El grupo fanático incendió la primera escuela que se construyó en julio de 2012, sin embargo, todos viven en el mismo pueblo y son creyentes de la misma virgen.
Desde la fundación de la secta, fue controlada por José Nabor Cárdenas, conocido como Papá Nabor, quien manipuló el fanatismo, y controló a toda la comunidad incluyendo los bienes personales.