Ciudad de México. El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) reconoció el compromiso de aumentar la inversión pública para generar empleos, y la instrucción al SAT para apresurar las devoluciones de IVA, sin embargo, tipificó como “incompleta” la respuesta y propuesta económica anunciada por el Presidente de la República ante el impacto de la pandemia COVID-19 en México.
Carlos Salazar Lomelín, director del CCE, reconoció los avances en los programas sociales del Gobierno de México, y dio la bienvenida a la ampliación del programa de créditos de la banca de desarrollo y de las instituciones de vivienda, no obstante, dijo que no correspondía a la dimensión de la crisis que se está enfrentando.
Por su parte, la CANACAR compartió las manifestaciones del CCE y de CONCAMIN, que dirige Francisco Cervantes Díaz, y se sumó al posicionamiento formulado para materializar las propuestas y acuerdos que den certeza al país.
Destacó que el 18 de marzo, el CCE envió al Presidente una propuesta para preservar el empleo formal e informal de 36 millones de mexicanos mediante acciones inmediatas para apoyar la sobrevivencia de las pequeñas y medianas empresas.
El 2 de abril presentó nuevamente al Presidente un plan para suscribir un gran convenio nacional entre gobierno, trabajadores, sector social y empresarios para transitar los siguientes noventa días, sin embargo, el organismo afirmó que sus propuestas no han sido tomadas en cuenta:
“No pedimos reducción de impuestos, ni privilegios, ni concesiones. Siempre hemos puesto a los trabajadores, sus familias y al país como nuestra prioridad. Nuestro objetivo es proteger el empleo, los salarios y los ingresos de las familias; sentar las bases para una recuperación inmediata; evitar que la crisis de liquidez se convierta en una crisis de solvencia; y contar con recursos para continuar los programas sociales. Sin embargo, nuestras propuestas aún no han sido tomadas en cuenta”, se destaca en el comunicado.
Ahí también se conminó al titular del ejecutivo a tener “buen juicio” para tomar las mejores decisiones que demandan estos tiempos de crisis:
“El buen juicio es esencial en tiempos difíciles. Lo concreto importa más que las generalidades. Se requiere tener sentido de la realidad. Todos esperamos que un estadista nos muestre su sabiduría; que esté familiarizado con los hechos relevantes; y que actúe. El liderazgo siempre exige un buen criterio; nunca dejar que las pasiones ni la emoción nos impidan hacernos las preguntas fundamentales”, demandó el organismo empresarial.
La CANACAR resaltó que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) arroja que el 97% de las empresas de autotransporte son micro, pequeñas y medianas. Tal y como lo ha mencionado el CCE, este nicho de la economía en cualquier sector, es el más vulnerable ante la poca fluidez de capital en tiempos de crisis.