Ciudad de México. Esta mañana, Fitch Ratings recortó su expectativa de crecimiento para la economía mexicana, prevé una contracción de 4 por ciento, lejos ya de su estimado previo que apuntaba a un crecimiento de 1 por ciento para este 2020.
La acción se dio en línea con la baja de la perspectiva de crecimiento de todos las economías que califica en América Latina. En suma, espera que la región se contraiga 2.6 por ciento este año, por arriba de la crisis financiera de 2008-2009. Para dicho pronóstico anunció que persisten “riesgos firmemente sesgados a la baja”, es decir, estos número se podrían recortar aún más.
"La propagación del coronavirus, la caída de los precios de los productos básicos, las condiciones de financiación externa más estrictas y la caída de los precios de los activos financieros internos debilitan sustancialmente el crecimiento económico en América Latina este año”, abundó la firma de riesgo.
Destacó que la actual situación se da también en una región que registró varios años de crecimiento económico “persistentemente débil" en relación con otras regiones de mercados emergentes. Hoy en día, si bien algunos cuentan con amortiguadores externos, hay un margen limitado para responder fiscalmente a las presiones económicas en la región.
México es la segunda economía -sólo detrás de la Argentina para la que se espera una contracción de 4.5 por ciento- con la previsión más baja de crecimiento. La calificadora de riesgo anunció el viernes pasado, un recorte a la calificación de la deuda respaldada por Petróleos Mexicanos, pasó los bonos de BB+ a BB, que implica ya un deterioro entre los bonos que se consideran basura.