Ciudad de México. El daño económico para el sector turístico puede ascender a más de 240 mil millones de pesos, un 25 por ciento más que el costo de construcción de la refinería de Dos Bocas y 1.7 veces más que la inversión prevista para el Tren Maya, de acuerdo con un análisis del Centro de Investigación y Competitividad Turística de la Universidad Anáhuac (Cicotur).
“El turismo mexicano vivirá muy difíciles momentos que solo podrán ser franqueados con un trabajo conjunto de los sectores público, privado y social”, dijo la institución académica en un reporte sobre la evolución del turismo al mes de abril.
Indicó que esa cifra de pérdidas es el resultado de un supuesto en el que se cancelen el 75 por ciento de los vuelos nacionales y el 80 por ciento de los vuelos a México desde otros países.
En el caso del gasto turístico, el Cicotur destacó que si bien el consumo es parte de la canasta de compras de las sociedades actuales, los gastos turísticos están supeditados al ingreso disponible de las familias. Así, en un entorno recesivo, el consumo turístico se reduce porque esas familias cancelan, posponen o modifican sus planes de desplazamiento, “sin olvidar que en este escenario las empresas adoptan un patrón de reducción en sus viajes”.
Además, 93 por ciento de las empresas turísticas, alrededor de 450 mil unidades, son microempresas con menos de 10 empleados que, ante la cancelación de ingresos, difícilmente tendrán el margen para enfrentar sus compromisos fiscales, crediticios y laborales, alertó el Cicotur Anáhuac.
Reveló que las grandes empresas tendrán daños considerables ante la “drástica” caída en los ingresos, la falta de inventarios y los compromisos financieros y con otros acreedores, lo que es previsible el recorte de personal, procesos de suspensión de pagos y, eventualmente, quiebras.