Buenos Aires. Las medidas que adoptó el gobierno argentino para tratar de mitigar la propagación de la enfermedad del nuevo coronavirus (Covid-19), entre ellas una cuarentena obligatoria de 24 días, la suspensión de las clases y el cierre de las fronteras, cuenta con el mayoritario respaldo de los residentes de ese país.
El aislamiento social preventivo y obligatorio que decidió la administración de Alberto Fernández comenzó el 20 de marzo y se extendió en principio hasta el 31 de ese mes, pero el presidente lo amplió hasta el 12 de abril.
"Hay que destacar que el gobierno reaccionó bien, decretando una cuarentena nacional cuando aparecieron los primeros casos de la enfermedad", dijo el académico y politólogo Patricio Giusto.
El experto, profesor visitante en la Universidad de Zhejiang, en China, y director del Observatorio Sino-Argentino, enfatizó que "el esfuerzo de este cierre total era necesario. El gran desafío es conciliar de ahora en más una gradual apertura de la economía, ya de por sí en estado muy crítico".
La abogada y docente Jésica León comentó que "en general, la decisión del gobierno sobre la cuarentena es correcta; se actúa teniendo en cuenta los datos y la situación no sólo a nivel local sino también mundial".
El cierre de fronteras "es triste, pero estoy totalmente de acuerdo con esa medida, porque es una de las formas de evitar la circulación de la enfermedad", explicó León, quien criticó la forma en que se ordenaron las clases virtuales tras la suspensión del ciclo lectivo presencial.
"La forma en que se lleva a cabo no es la más adecuada, porque hay alumnos con exceso o falta de actividad, según la región, y no todos los docentes y alumnos tienen la misma posibilidad de acceder. Esa desorganización genera frustración en alumnos y docentes", dijo.
Una reciente encuesta de la consultora Poliarquía reveló que 60 por ciento de los residentes dijo estar "muy de acuerdo" con la extensión de la cuarentena, y un 29 por ciento señaló estar "bastante de acuerdo", mientras que la aprobación del accionar del presidente en relación a la pandemia llegó a 82 por ciento.
Un informe de la consultora Reputación Digital mostró que 78.1 por ciento de los argentinos apoyó la decisión de extender la cuarentena, mientras que el 21.9 por ciento de los residentes se mostró en contra.
Mariela Berretti se desempeña en una firma consultora de servicios migratorios en Buenos Aires, y consideró que "todas las medidas tomadas hasta ahora me parecen bien, ya que está primero la salud de las personas".
Jorge Rivas, pensionista y miembro de la reconocida "Fundación del Quemado Dr. Fortunato Benaim", explicó a esta agencia que "cumplir con la cuarentena es un acto de militancia social, que exige de nosotros el cuidado personal para que el bien común se pueda manifestar a través de la no proliferación de la pandemia".
"No exige de nosotros más que quedarnos en casa, y lo vivo con la tranquilidad de que mi aporte puede ser mi mejor contribución", dijo el hombre.
Paola de Simone, abogada y estudiante de posgrado en la Universidad de Buenos Aires, dijo que "en principio, estoy de acuerdo con las políticas para evitar una mayor propagación del virus y con todo lo que se haga para proteger la salud pública".
"Sin embargo, la cuarentena es excesiva, muy extensa, y me pregunto si no va a perjudicar todavía más a nuestra economía. Además, estar sin clases pone en peligro el ciclo lectivo y la forma en que se dispuso el cierre de fronteras ha dejado a miles de residentes varados en el exterior", lamentó.