Montevideo. Los gobiernos de Uruguay y Brasil acordaron cerrar su frontera terrestre común desde este domingo y por al menos 30 días, informó el canciller uruguayo Ernesto Talvi.
"Brasil acaba de emitir un decreto, que es el que acordamos y consensuamos, y nosotros emitiremos un decreto espejo" en las próximas horas, dijo el ministro en la noche del domingo en declaraciones a los medios.
De acuerdo a la resolución brasileña ya publicada en el diario oficial por el gobierno de Jair Bolsonaro, sólo pueden ingresar desde Uruguay a ese país sus ciudadanos o residentes, así como uruguayos que tengan cónyuges o hijos brasileños.
El transporte de carga podrá seguir transitando en ambas direcciones, y la medida permite también la libre circulación de quienes residen en las ciudades limítrofes.
El decreto uruguayo, aún sin publicar, irá en el mismo sentido.
"Lo excepcional es el régimen para los que viven en ciudades de frontera: si pueden acreditar que así es el caso, con cualquier certificado que acredite residencia, van a poder coexistir y convivir en la ciudad como lo hacen habitualmente", señaló Talvi.
"Tenemos una frontera muy larga y donde coexisten brasileños y uruguayos en ciudades que son binacionales, son una misma ciudad", agregó.
El decreto brasileño aclara que la medida podría prorrogarse si así lo recomendara la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria.
Brasil había cerrado el jueves de la semana pasada las fronteras terrestres con todos sus vecinos, a excepción de Uruguay.
El gobierno uruguayo, por otra parte, agregó el sábado a Brasil, Argentina y Chile a la lista de países que considera de riesgo por el coronavirus.
Esto implica que las personas que ingresen al territorio desde esas zonas deberán someterse a una cuarentena obligatoria de 14 día