Londres. Un equipo de arqueólogos de varios países estudia los restos de una estructura de más de 20 mil años construida con huesos de unos 60 mamuts y descubierta al sur de Rusia, publica la revista británica Antiquity.
Según los investigadores se trata de la estructura circular más antigua construida por humanos descubierta en esa región, con un diámetro de 12.5 metros y varios hoyos a su alrededor, edificación que probablemente se usó como refugio durante el invierno.
Los arqueólogos explicaron que para la construcción de las paredes de la esctructura se utilizaron 51 mandíbulas inferiores y 64 cráneos de mamut.
Al interior de la cabaña se encontraron algunas figurillas de animales, varias herramientas de hueso y restos de carbón, agregaron.
La arqueología muestra cómo sobrevivían nuestros antepasados en aquel ambiente desesperadamente frío y hostil, en el clímax de la última Edad de Hielo (...) estos grupos consiguieron adaptarse y encontraron comida, refugio y agua, aseguró el británico Alexander Pryor, uno de los encargados del estudio.
Los investigadores pertenecen a la Universidad de Exeter, la Universidad de Cambridge, la Reserva del Museo Estatal de Kostenki, la Universidad de Colorado Boulder y la Universidad de Southampton.
Los misteriosos círculos óseos hechos de los restos de docenas de mamuts revelaron pistas sobre cómo las antiguas comunidades sobrevivieron a la Edad de Hielo de Europa. Se sabe que alrededor de 70 de estas estructuras existen en Ucrania y la llanura rusa occidental.
Los huesos probablemente provenían de cementerios de animales, y el círculo estaba oculto por sedimentos y ahora está a un pie debajo del nivel de la superficie.
La mayoría de los huesos encontrados son de mamuts. También se hallaron pequeños números de renos, caballos, osos, lobos, zorros rojos y huesos de zorro ártico.
-Restos de madera carbonizada-
Los arqueólogos de la Universidad de Exeter también descubrieron restos de madera carbonizada y de plantas blandas no leñosas dentro de la estructura, situada a las afueras de la moderna aldea de Kostenki, a unos 500 kilómetros al sur de Moscú. Esto muestra que la gente quemaba madera y huesos como combustible, y las comunidades que vivían allí habían aprendido dónde buscar plantas comestibles durante la Edad de Hielo.
Las plantas también podrían haberse utilizado para venenos, medicamentos, cuerdas o telas.
Pryor destacó: Kostenki 11 representa un raro ejemplo de cazadores-recolectores paleolíticos que viven en este ambiente hostil. ¿Qué podría haber traído a los antiguos cazadores-recolectores a este sitio? Una posibilidad es que los mamuts y los humanos podría haber venido al área en masa porque tenía un manantial natural que habría proporcionado agua líquida no congelada durante todo el invierno, algo raro en este periodo de frío extremo.
La mayoría de los otros lugares en latitudes similares en Europa habían sido abandonadas en este momento, pero estos grupos habían logrado adaptarse para encontrar comida, refugio y agua.
La última Edad de Hielo, que barrió el norte de Europa alcanzó su etapa más fría y severa hace unos 23-18 mil años, justo cuando se estaba construyendo el sitio en Kostenki 11. Las reconstrucciones climáticas indican que en ese tiempo los veranos eran cortos y frescos y los inviernos largos y fríos, con temperaturas de alrededor de -20 grados centígrados o más bajas. La mayoría de las comunidades abandonaron la región, quizá debido a la falta de presas para cazar y plantar recursos de los que dependían para sobrevivir. Finalmente, los círculos óseos también fueron abandonados a medida que el clima se volvía más inhóspito.
Antes, los arqueólogos habían asumido que las estructuras circulares de hueso de mamut se usaban como viviendas durante muchos meses a la vez. El nuevo estudio sugiere que puede no haber sido siempre el caso, ya que la intensidad de la actividad en Kostenki 11 parece menor de lo que se esperaría de un campamento base a largo plazo.