París, Francia. A consecuencia de la aceleración en los últimos días de casos de COVID-19 cercanos a algunas de las plantas de producción, y de las rupturas de las cadenas de suministro de autopartes de proveedores importantes, el presidente ejecutivo, Louis Gallois, y los miembros de la célula de crisis de el fabricante de automóviles francés Groupe PSA han decidido el cierre de todas sus fábricas en Europa de forma escalonada.
El grupo propietario de marcas como Peugeot, Citroen, Vauxhall, Opel y DS, informó a través de un comunicado de prensa que el cierre de sus centros de producción se realizarán según el siguiente calendario, y hasta el día 27 de marzo.
16 de marzo: Madrid (España), Mulhouse (Francia)
17 de marzo: Poissy, Rennes, Sochaux (Francia), Zaragoza (España), Eisenach, Rüsselsheim (Alemania), Ellesmere Port (Gran Bretaña), Gliwice (Polonia)
18 de marzo: Hordain (Francia), Vigo (España), Mangualde (Portugal)
19 de marzo: Luton (Gran Bretaña), Trnava (Eslovaquia),
El cierre de las fábricas de mecánica y brutos se ajustará en consecuencia. Los equipos de gestión de cada centro pondrán en marcha localmente los protocolos de cierre de las plantas que se llevarán a cabo en coordinación con los agentes sociales.
La decisión de PSA se suma a las de otros gigantes automotrices, golpeados también por la falta de suministros y la expansión del virus: Ford Motor Company, Volkswagen, así como Seat, Renault y Nissan.
Ford ha parado hoy la producción de su factoría de Almussafes, Valencia, España después de que tres de sus 7,000 empleados dieron positivo por coronavirus. Mientras, la dirección de Volkswagen en Pamplona detuvo el turno de noche el domingo y mantendrá el paro por un tiempo que no ha concretado aún.