Chihuahua, Chih. Los abogados de Juan Carlos M. El Larry, presunto homicida de la periodista Miroslava Breach Velducea, presentarán este viernes como testigos de refutación a dos familiares y un vecino de Crispín Salazar Zamorano (quien es líder del grupo criminal Los Salazar en el municipio de Chínipas), para desmentir la acusación de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (Feadle) que señala a dicho grupo del narcotráfico como autor intelectual del homicidio.

Al iniciar el desahogo de pruebas de la defensa en el juicio oral, los abogados de El Larry pidieron escuchar el testimonio de Joel Salazar Zamorano, hermano del presunto líder criminal Crispín Salazar, además de Martina Salazar García, quien también es familiar de Críspin, y de Lourdes Pérez Vega, habitante de Chínipas.

Los nuevos testigos comparecerán en el juicio oral este viernes para refutar la declaración del testigo protegido Apolo, quien acusa a Crispín Salazar de ser el autor intelectual del crimen y a Juan Carlos M. El Larry de ser el asesino material.

Semanas atrás, el Ministerio Público de la Feadle señaló a Crispín Salazar Zamorano como autor intelectual, por testimonios del testigo protegido Apolo, quien públicamente se conoce es Édgar Salazar Gaxiola, hijo de Crispín y actualmente detenido por otro delito.

En su testimonio, Apolo relató que el homicidio de la corresponsal de La Jornada se decidió en el pórtico de la casa de Crispín Salazar en Chínipas y a El Larry le ordenaron matarla “por las cosas que la periodista decía, por lo que había salido en el periódico, porque le estaba echando mucha tierra a Los Salazar”, dijo.

Añadió que El Larry lo amenazó varias veces dentro de la prisión y “tenía luz verde para chingarlo” por instrucción de su papá Crispín Salazar y su primo Alfredo Salazar, quienes buscaron evitar la declaración del testigo.

Los abogados defensores buscan demostrar que Apolo tiene más de seis años sin vivir con su papá en Chínipas, lo cual vuelve inverosímil su declaración.

Ricardo Sánchez Pérez del Pozo, fiscal de la Feadle, pidió no admitir a los tres testigos de refutación, porque la defensa los entrevistó con las mismas preguntas y las respuestas fueron "literalmente las mismas".

El juez Nestor Pedroza aceptó como prueba el testimonio de los nuevos testigos para garantizar que la defensa, al igual que el Ministerio Público, cuente con los elementos suficientes para presentar su caso.

La acusación que presentó la Feadle al inicio del juicio oral apunta a lograr una sentencia contra El Larry por el delito de homicidio, señalando que Los Salazar y su líder, Crispín Salazar Zamorano, son los autores intelectuales.

Mientras, otros tres testigos que la defensa anunció desde la audiencia intermedia fueron interrogados este jueves y en su declaración afirmaron que El Larry estuvo en Chínipas el 23 de marzo de 2017 y no en la ciudad de Chihuahua, por lo que no participó en el homicidio de Miroslava Breach.

Los testigos de la defensa que comparecieron este jueves fueron presentados como habitantes de Chínipas y conocidos del acusado, dijeron que desayunaron con El Larry alrededor de las seis de la mañana el día del homicidio, en un restaurante del municipio de Chínipas, y defendieron al acusado al señalar que se dedica a la ganadería.

El Ministerio Público de la Feadle argumentó que los testimonios de los testigos de la defensa eran poco creíbles, porque hay múltiples pruebas y testimonios que acreditan que El Larry sí estuvo en la ciudad de Chihuahua el día del asesinato de Miroslava Breach y en las inmediaciones del domicilio de la periodista.

El testigo Apolo declaró en el desahogo de pruebas del Ministerio Público por videoconferencia desde una cárcel en Sonora, y relató que Juan Carlos M. El Larry lo amenazó mientras estuvieron recluidos juntos a principios del año pasado en la prisión del municipio de Aquiles Serdán, Chihuahua, para que no revelara la forma en que se planeó la muerte de Miroslava.

El hijo de Crispín Salazar accedió a declarar en el juicio oral para deslindarse del asesinato de la periodista y a cambio de recibir protección, porque su papá y su primo, Alfredo Salazar Ramírez (también líder del grupo criminal Los Salazar), pidieron a El Larry que lo asesinara dentro de la cárcel para evitar que los incrimine.