Ciudad de México. El presidente Andrés Manuel López Obrador instruyó al secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, para que realice una revisión del personal que trabajó con Genaro García Luna, para evitar tener servidores públicos que pudieran estar involucrados con bandas delictivas.
“Yo di instrucción de que a todos los vinculados al caso García Luna se les revisara su situación; en qué participaron, y evitáramos nosotros tener en el gobierno federal servidores públicos con esas características”, sostuvo en su conferencia de prensa.
Señaló que a Durazo le pidió “una revisión, porque se han quedado varios de las administraciones pasadas, quienes estuvieron cerca y se presume fueron cómplices o guardaron silencio o fueron subordinados. No queremos afectar nuestro gobierno, no es sólo asunto de formación de fondo. ¿Quién tiene principios, convicciones? Si no es honesto, no nos sirve. Lo digo respetuosamente”.
No sólo es un asunto de imagen o de forma, sino que de fondo, ya que “quien no es honesto no lo queremos”, insistió.
Afirmó que lo peor es la impunidad. “Imagínense que los encargados de garantizar la paz y tranquilidad estén involucrados con las bandas de la delincuencia, así no hay ninguna posibilidad, es sálvese quien pueda, pecho a tierra”.
Manifestó que así como debe haber separación entre poder político y económico, “debe haber una frontera entre delincuencia y autoridad”. Recordó que antes, hasta en el más alto nivel había contubernio.
El presidente fue cuestionado sobre la posible vinculación de Alfredo Higuera Bernal, titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada, y de su hermano Gilberto, fiscal General de Puebla, con García Luna.