Caracas. El presidente Nicolás Maduro activó sorpresivamente este lunes ejercicios militares en la capital venezolana y otros cuatro estados, un día antes de una marcha convocada por la oposición para intentar elevar la presión contra el gobierno.
Decenas de militares armados, algunos de ellos montados en tanques, iniciaron la segunda fase de los ejercicios realizados hace tres semanas en todo el país, según imágenes que difundió la televisora estatal. A lo largo del lunes ya se podía observar a los soldados que recorrían la capital del país.
Maduro comentó en una llamada telefónica a la estatal Venezolana de Televisión que la segunda fase de la operación Escudo Bolivariano 2020 se desplegó en Caracas y los estados de Miranda, La Guaira, Apure y Bolívar, y que luego se extenderá a los restantes 19 estados del país.
Sobre el alcance de los nuevos ejercicios, el jefe del Comando Estratégico Operacional, almirante en jefe Remigio Ceballos, dijo que todos los miembros de las fuerzas armadas, integradas por unos 200 mil hombres y más de tres millones de civiles armados conocidos como “milicias”, participarán en las operaciones de “resistencia de ciudades”, acciones de inteligencia y contrainteligencia y búsqueda de grupos armados para poner a prueba los planes de defensa militar.
La televisora estatal señaló que los ejercicios se realizarán hoy y mañana.
Este martes se tiene prevista una movilización convocada por la oposición que aspira a llegar en el centro de Caracas a la sede de la Asamblea Nacional que fue tomada desde enero por las fuerzas de seguridad, que han impedido el ingreso al lugar al jefe del Congreso, Juan Guaidó, y los legisladores opositores.
En las instalaciones del Palacio Legislativo sólo operan la oficialista Asamblea Nacional Constituyente y una directiva paralela del Congreso encabezada por Luis Parra, un disidente de la oposición que fue expulsado del partido Primero Justicia tras ser señalado de corrupción.
“Tenemos que reactivar la presión interna”, mencionó Guaidó al llamar a sus seguidores a salir este martes para poner en un “dilema” a Maduro ante la activación de un acuerdo de “pliego nacional de conflicto” que reúne las demandas de los sectores adversos al gobierno.
El líder opositor desestimó la decisión del gobierno de enviar militares a varios puntos de la capital y los alrededores de la Asamblea Nacional y dijo en rueda de prensa que la oposición está considerando otras alternativas para “proteger a nuestra gente”, que incluyen posiblemente que el Congreso sesione en otra sede diferente al Palacio Legislativo.
La movilización opositora forma parte de una nueva fase de presiones que emprendió Guaidó, quien ha sido reconocido como presidente interino de Venezuela por casi 60 países, tras la gira internacional que realizó entre enero y febrero por varios países de Europa, Canadá y Estados Unidos y que incluyó un encuentro en la Casa Blanca con el mandatario Donald Trump.
En relación con el incendio que se registró el sábado en unos almacenes del Consejo Nacional Electoral (CNE), en el este de la capital, en el que quedaron destruidas gran parte de las máquinas de votación y los lectores de huellas, el jefe de la Asamblea Nacional exigió hoy a las autoridades que den una respuesta y dijo que aunque no hay información precisa sobre lo que ocurrió no duda que fue “provocado por la dictadura”.
“Los que tienen que dar respuestas y no las han dado es la dictadura. ¿Por qué almacenaban en una zona de seguridad, en un único punto, material sensible para la nación? ¿Cómo es eso que ellos tenían custodia y resguardo y esto sucedió?”, agregó.
Por su parte, el presidente de la Constituyente, Diosdado Cabello, acusó a la oposición del incendio ocurrido en los almacenes del CNE, que consideró como un “ataque terrorista”, y descartó que eso vaya a impedir la realización de elecciones parlamentarias este año.
“Cada vez que la derecha se encuentra acorralada buscar eventos para tratar de levantar el ánimo de quienes perdieron el ánimo hace tiempo”, dijo a la prensa el dirigente.