Quedan otros 13 planteles tomados por estudiantes, cinco de nivel superior y ocho de bachillerato, en los que si bien la demanda generalizada es la atención efectiva a la violencia en contra de las mujeres, la situación es distinta en cada plantel, pues los grupos y activistas que los mantienen cerrados tienen demandas particulares.
Las autoridades de la UNAM han manifestado que han dado respuesta a todas las demandas estudiantiles que se les han presentado y que la reapertura de las escuelas es necesaria para implementar medidas para erradicar la violencia de género.
Lo cierto es que desde finales de enero, el diálogo está prácticamente detenido en varias de estas escuelas y las negociaciones no avanzan.
Lo que avanza, han manifestado las autoridades, es el cumplimiento de los pliegos petitorios.
Quizás el caso emblemático de este movimiento estudiantil que lucha en contra de la violencia de género es el de la Facultad de Filosofía y Letras (FFL), cerrada desde el 4 de noviembre. Las demandas de las Mujeres Organizadas de esta escuela han jugado un papel determinante no sólo en la ola de paros que atraviesa la institución, que tiene alrededor de 100 mil estudiantes sin clases, sino en las transformaciones que han sido anunciadas por la rectoría para erradicar la violencia y avanzar hacia la igualdad entre hombres y mujeres.
Las propias autoridades universitarias han manifestado que sus protestas están llevando a una transformación largamente aplazada.
Por ello, de acuerdo con universitarios, los avances en las negociaciones en la FFL podrían marcar el rumbo que seguirán los paros en otras escuelas. Esta semana, las alumnas han explicado que sus demandas no se han cumplido a cabalidad y que para regresar al diálogo se deben cumplir condiciones como que el Consejo Universitario haga nuevos cambios al Estatuto General de la UNAM, lo que, según ha manifestado el rector Enrique Graue, sucederá en este mismo marzo.
En tanto, en la mayoría de las facultades cerradas, hay contacto entre autoridades y alumnas en paro, de acuerdo con fuentes de la UNAM. Así sucede en las facultades de Psicología y Economía, en donde las alumnas han presentado pliegos de demandas y han exigido su solución. En la de Ciencias Políticas y Sociales, por otra parte, las alumnas no han presentado un pliego petitorio, pues han manifestado que tomaron la escuela en solidaridad con la lucha de otras universitarias. En la facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia continúa el paro indefinido.
En los Colegios de Ciencias y Humanidades y planteles de la Escuela Nacional Preparatoria, de acuerdo con alumnos, las negociaciones tienen pocos avances en las escuelas cerradas, que representan más de la mitad de los bachilleratos de la universidad: las sedes Azcapotzalco, Sur y Oriente del CCH, y las preparatorias 3, 5, 6, 8 y 9, que en conjunto atienden a más de 60 mil estudiantes.