Santiago. Miles de personas contrarias a la reforma de la Constitución marcharon este sábado en Santiago para defender esta opción en el plebiscito del 26 de abril, que decidirá si se cambia la Carta Magna heredada de la dictadura de Augusto Pinochet.
Con cascos, chalecos antibalas, bastones retráctiles y haciéndose llamar primera línea
–tal como los manifestantes del bando contrario que cada viernes se enfrentan con la policía en las cercanías de la céntrica Plaza Italia–, unas 40 personas lideraron el avance de la marcha entre algunos episodios de violencia.
Hay cosas que arreglar pero cambiar la Constitución no es necesario, porque es cambiar las reglas del juego como si todo estuviera mal
, declaró Maximiliano Leiva, un ingeniero comercial de 43 años.
Para qué partir de cero cuando ya tenemos una Constitución
, afirmó de su lado Francisco Acevedo, de 19 años.
Estas manifestaciones comenzaron a organizarse después de las masivas protestas que desde octubre y cada viernes se desarrollan en la Plaza Italia de Santiago, en rechazo al gobierno de Sebastián Piñera y a favor de un cambio en la Constitución redactada en 1980 durante la dictadura de Pinochet (1973-1990).
El Instituto Nacional de Derechos Humanos informó ayer que se confirmó la muerte de un hombre de 48 años, quien recibió un disparo durante la represión policial de las manifestaciones del viernes.
Ayer, los manifestantes se congregaron en la estación del Metro El Golf, en una acomodada zona de la capital, para llegar igualmente a las cercanías de la Plaza Italia. Durante su avance algunos participantes gritaron consignas como ¡Viva Pinochet¡
o ¡Morir luchando, marxista ni cagando!
Un grupo a la cabeza de la marcha se enfrentó y agredió a algunas personas que estaban en el lugar, entre ellas a un periodista de Afp, quien cubría la manifestación.
El viernes, decenas de miles de personas se congregaron en la Plaza Italia, en la más multitudinaria manifestación callejera contra el gobierno de lo que va del año, que terminó en enfrentamientos con la policía, pero que inicialmente se había desarrollado de forma pacífica.
El plebiscito del próximo 26 de abril fue acordado por el gobierno y las fuerzas políticas como una de las fórmulas para salir de la aguda crisis social que enfrenta Chile desde octubre del año pasado y que se ha traducido en manifestaciones, ataques al comercio, saqueos y violentos enfrentamientos que se saldan con una treintena de muertos y miles de heridos.
Las opciones por las que votar en el plebiscito serán apruebo
o rechazo
la modificación de la Carta Magna.