Ciudad de México. Después de que el 21 Tribunal Colegiado de Circuito en Materia Administrativa revocó por unanimidad la suspensión dictada a favor de la Confederación de Cámaras Industriales de México (Concamin) en contra la NOM 051, que establece un nuevo etiquetado para alimentos procesados, la Alianza por la Salud Alimentaria se congratula de la decisión del tribunal colegiado al reconocer que el proceso aprobación de esta norma se apegó a la legislación establecida.
Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor, señaló que “la gran industria de las bebidas endulzadas y productos comestibles ultraprocesados se acostumbró a dictar las normas y no ha soportado un proceso democrático y transparente apegado a la legislación en el cual no tuvo mayoría”.
Por ello, destacó que esta decisión “respalda una política urgente, que debe ser acompañada de otras medidas para lograr frenar las emergencias epidemiológicas de obesidad y diabetes.”
Luego que el pasado 1 de marzo se anunció la suspensión provisional de la NOM 051 en respuesta al amparo promovido por la Concamin en contra de esta norma, hubo un llamado desde la sociedad civil, organismos internacionales y dependencias federales al Poder Judicial para proteger los derechos de los ciudadanos y el interés superior de la infancia frente a los intereses comerciales y económicos.
“La decisión del Tribunal de revocar la suspensión provisional no solo protege el derecho a la salud de las personas frente a los intereses de las industrias, también refuerza lo que desde la sociedad civil y la academia se ha mencionado: por primera vez tenemos un proceso democrático y basado en evidencia científica y la industria utilizará cualquier mecanismo para bloquearlo”, apuntó Javier Zúñiga, coordinador del área legal en El Poder del Consumidor.
Agregó que su rechazó a la puesta en marcha de la NOM 051 refleja “cómo antepondrán siempre sus intereses frente al derecho a la información, a la salud y a la alimentación de las personas. En este caso, el Poder Judicial ha garantizado los derechos de las personas con su decisión”.
La Alianza por la Salud Alimentaria recuerda que el etiquetado frontal de advertencia es una política pública que en conjunto con otras como la regulación de la publicidad de comida chatarra y bebidas azucaradas dirigida a la infancia, y la regulación de los alimentos y bebidas en las escuelas, deben formar parte de una política integral de combate a las emergencias epidemiológicas de obesidad y diabetes en México.