La presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Rosario Piedra Ibarra, acompañó a integrantes del Comité de Familiares de Detenidos y Desaparecidos “Hasta Encontrarlos”, quienes entregaron a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), una petición para que atraigan el caso por la desaparición de Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, ocurrida en Oaxaca en 2007.
Desde diciembre pasado, Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal, con sede en la Ciudad de México, decidió remitir a la SCJN el caso de un amparo promovido por familiares de los desaparecidos, cuyo fallo en primera instancia fue impugnado por la Sedena y la ahora Fiscalía General de la República (FGR).
Sin embargo, hasta la fecha la SCJN no se ha abocado a resolver el asunto, por lo que sus familiares presentaron una petición a los ministros, apoyada con las firmas de 323 personas y 150 organizaciones nacionales e internacionales, para que resuelvan su petición.
La titular de la CNDH dijo sobre su presencia en este acto: “me acompañar este caso, de sus padres que fueron desaparecidos desde el 2007, en el sexenio de Felipe Calderón, para que esto no quede en la impunidad.”
Por su parte, Nadin Reyes, hija de Edmundo Reyes, afirmó que su padre fue reinvidicado por el Ejército Popular Revolucionario (EPR), como uno de sus miembros, y por ello responsabilizó de las desapariciones al entonces gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, y al entonces presidente Felipe Calderón: “Hay evidencias de en que la desaparición de nuestros familiares no solo participaron autoridades locales, policías estatales, sino también el Ejército Mexicano, la última vez que se les vió a nuestros familiares fue en el Campo Militar No.1, aquí en la Ciudad de México.”