Ciudad de México. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ajustó a 0.7 por ciento el estimado de crecimiento para México de este año y 1.4 por ciento para el siguiente, una vez descontado el efecto que tendría el brote de coronavirus en las principales economías.
En ambos casos las previsiones fueron recortadas en 0.5 y 0.2 por ciento, respectivamente, de los datos que se publicaron en noviembre para 2020 y 2021, siendo así uno de los países con el mayor deterioro, aunque en ningún momento el organismo recarga la baja por efecto del Covid-19.
Para la economía mundial, la OCDE también recortó en 0.5 el estimado de crecimiento, para cerrar en 2.4 por ciento; espera que en 2021 repunte a 3.3 por ciento. El organismo detalla que antes del brote de Covid-19, “los datos de actividad seguían siendo débiles”, pero en contrapeso, las condiciones financieras se habían fortalecido con políticas monetarias menos estrictas y la reducción de tensiones en la política comercial.
No obstante, la reducción de la producción y consumo en China se ha resentido en empresas de todo el mundo. Primero por su papel en las cadenas de suministro mundiales como productor de bienes intermedios, entre ellos computadoras, electrónica, productos farmacéuticos y equipos de transporte, y segundo porque es uno de los principales centros de demanda de muchos productos.
“Un retraso prolongado en la restauración de la producción total en las regiones afectadas se sumaría a la debilidad de los sectores manufactureros en muchos países, dado el tiempo que lleva enviar suministros a todo el mundo”, recalcó la OCDE.
Así mismo, persiste la afectación a las industria turística. Ambos rubros implicaron que en China, origen del brote y donde hay decenas de miles de pacientes infectados, se recorto en 0.8 el estimado de crecimiento para dejarlo en 4.9 por ciento en este año, y se elevó en 0.9 la previsión de 2021, cuando se apunta un avance de 6.4 por ciento.