La Habana. Los restaurantes, bares y cafeterías estatales, que hasta ahora vendían en las dos monedas circulantes en Cuba, sólo prestarán servicios en pesos cubanos (CUP) a partir de mañana domingo, otro paso hacia la unificación monetaria.
"Se eliminará el pago en CUC (peso convertible) en las unidades del Sistema de Comercio que prestan servicios gastronómicos; lo que permitirá adquirir en CUP productos tales como cervezas, refrescos, agua, helados, confituras y bebidas alcohólicas", dijo el Ministerio de Comercio Interior (Mincin) en su sitio oficial.
Cuba se prepara para unificar sus dos monedas circulantes, el CUP, o peso cubano, y el CUC, peso convertible (igual al dólar, 24 CUP), que desde 1994 caminan en paralelo en el mercado local.
La unificación es una meta imprescindible para eliminar fuertes distorsiones en la economía, pero "no corremos contra reloj", dijo a la Afp el ministro de Economía, Alejando Gil, en diciembre pasado.
"El pago será exclusivamente en pesos cubanos; teniendo en cuenta las condiciones actuales de automatización de los sistemas contables de dichas unidades", señaló el Mincin en un comunicado, citando causas técnicas de la medida.
Lo más complejo de ese proceso de unificación será retirar las tasas de cambio preferenciales para las empresas estatales, que significan más de 85 por ciento de la economía, pero ya se vienen dando pasos en los servicios a la población.
Algunos supermercados que trabajan con CUC y CUP empezaron en diciembre a entregar el vuelto solo en CUP.
"Como parte de las medidas de ordenamiento monetario que lleva a cabo el país, se decidió iniciar el experimento", dijo entonces el diario oficial Granma.
También el gobierno prohibió la entrada y salida de CUC en los bolsillos de los viajeros. Y en el duty free del aeropuerto de La Habana ahora solo puede comprarse en CUP o en divisas extranjeras.
Una tercera moneda, el dólar norteamericano, tuvo circulación legal desde 1997 a 2004, en los años más duros de la crisis económica conocida como Período Especial, que sobrevino a Cuba tras la desaparición del bloque soviético, su principal aliado.
La necesidad de divisas frescas llevó al gobierno en octubre a abrir tiendas especiales de electrodomésticos y piezas de autos en dólares a precios competitivos, usando tarjetas de crédito alimentadas fundamentalmente por las remesas que los cubanos emigrados envían desde el exterior.