Ciudad de México. En la 41 Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería, el escritor y divulgador de la ciencia José Gordon, quien presentó su más reciente libro Gato encerrado, sostuvo que “nuestra sociedad necesita pensamiento crítico, imaginación y creatividad para salir de los límites en los que vivimos”.
Con ilustraciones e ingeniería en papel de Sebastián Ilabaca, el libro editado por Sexto Piso propone al lector un viaje cósmico mediante la ciencia y la poesía para ver si podemos escaparnos de la caja perceptual de la mente, romper los límites y descubrir el vuelo de la inteligencia y la imaginación.
El autor, que estuvo acompañado de Fernando Rivera Calderón, invitó al público a colocarse un antifaz de gato, ya que “si vemos la vida con ojos de gato, podemos mirar lo que está más allá de las orillas de nuestros ojos”.
Para adentrar a ese universo de letras y magia, José Gordon cantó con Fernando Rivera la canción del Gato encerrado que habla de cómo se puede escapar de esa caja “armada por nuestro cerebro, pero también por nuestros prejuicios, por nuestra educación, por nuestra historia y por todas las formas que nos han educado y por las que tenemos que guardar los límites”.
Fernando Rivera explicó que en su libro Pepe Gordon hace referencia a la novela Rayuela, de Julio Cortázar, porque muestra lo que en realidad vemos cuando nos damos un beso, ya que el autor argentino narra lo que ocurre en ese momento: ‘Me mira, de cerca más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí y los cíclopes se miran’.
José Gordon comentó que el arte nos permite salir de esa caja de prejuicios y esto puede pasar en la vida cotidiana, ya que la realidad está hecha de lo que somos y deseamos, y lo que somos e imaginamos. “La imaginación es muy importante para salir de la caja. Salgamos con los ojos de la imaginación, de los límites y prisiones que tenemos en la vida”.
Rivera Calderón y el autor cantaron Mare Nostrum, una pieza sobre cómo romper la caja y cómo darnos cuenta de que el pensamiento es un mar sin límites. “Cuando se rompe la caja nos damos cuenta de que somos una inteligencia colectiva.
El divulgador de la ciencia compartió que la literatura abre la mirada y con eso se da un efecto que transforma profundamente las cosas y “nos hace ver cosas paradójicas de la realidad”.