Texcoco, Méx. Benito Peralta Arias, presidente del comité de seguridad de la comunidad indígena de San Jerónimo Amanalco, fue privado de la libertad, luego de que en días pasados denunció por escrito, ante las autoridades municipales de Texcoco –emanadas de Morena– la operación de una gasera ubicada en la entrada de la población, donde presuntamente se vende hidrocarburo sustraído ilegalmente de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) que atraviesan esta región.

Tras la privación ilegal de su líder, los pobladores se trasladaron a la gasera y retuvieron a cinco trabajadores y a un menor, quienes despachaban combustible a tres pipas. Los llevaron a la explanada municipal y allí los retuvieron. Alrededor de las 22:30 horas los entregaron a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).

A mediodía, representantes de la Secretaría de Gobierno del estado de México intentaron dialogar con los pobladores. Durante dos horas intercambiaron posturas en la delegación municipal, pero la gente no quedó convencida de las promesas de los funcionarios, quienes aseguraron que no podían dar información porque se llevaba a cabo trabajo de inteligencia para dar con el paradero de Peralta Arias.

Ante la falta de respuesta, la gente determinó que en las próximas horas desmantelarán la gasera y están dispuestos, advirtieron, a ir a la casa de los integrantes de la banda de huachicoleros que operan sobre todo a la orilla de la carretera federal México-Veracruz.

Alrededor de las 14:30 horas, los concurrentes dieron por concluido el diálogo con las autoridades y se trasladaron al kilómetro 33 de dicha arteria y la bloquearon en ambos sentidos. Colocaron barricadas y señalamientos de una obra y sobre éstas pegaron la ficha de búsqueda emitida por el programa Odisea de la FGJEM.

En el bloqueo leyeron un pliego petitorio de cinco puntos: que Benito Peralta aparezca con vida; castigo a los responsables del crimen organizado; castigo a las autoridades involucradas en la protección del huachicoleo; freno al robo de combustibles y diálogo con el gobierno federal.

Tenemos avances del paradero del señor Benito, pero vamos a reservarlos, les respondía una representante del gobierno estatal, quien pedía tiempo para dar con Peralta Arias y que no se bloqueara la vía.

Un habitante le respondió: “Ya sabemos quiénes son (los huachicoleros) y podemos ir por ellos”. Otro vecino advirtió que el pueblo no permitirá que jueguen con ellos; argumentó que ya se entregaron los puntos de las tomas clandestinas y ninguna autoridad ha actuado contra los huachicoleros. Ayer fue Benito, ¿hoy quién sigue? Queremos respuestas, corearon.

Las autoridades estatales insistieron en que los cinco trabajadores ya quedaron a disposición del Ministerio Público, la gasera fue intervenida por la FGJEM y en el transcurso de la semana será clausurada.

Retienen camioneta y tanque con 3 mil 500 litros

Pero la gente insistió en que si en las próximas horas no aparece su compañero, actuarán por propia mano. Mientras, frente a la iglesia tienen retenida una camioneta con un tanque de 3 mil 500 litros.

La camioneta de gas ya no la van a entregar, porque el chofer mostró una factura de compra emitida en Ecatepec, cuando a la misma hora cargaba hidrocarburo en la gasera de San Jerónimo Amanalco, comunidad localizada a unos 10 kilómetros del límite con Tlaxcala.

Antes de bloquear la vía, los pobladores expulsaron a las autoridades municipales de Texcoco, encabezadas por la edil morenista Sandra Luz Falcón Venegas, a quienes les gritaron: ¡corruptos! ¡rateros!, pues aseguraron que la policía local filtró al crimen organizado la información de la denuncia hecha por el Comité de Seguridad indígena.