Ciudad de México. El aumento de las remesas y al salario mínimo, así como los subsidios de programas sociales, explican que el comercio siga en crecimiento pese a la desaceleración que registra la economía nacional, aseguró Iñaki Landáburu, presidente de la Asociación Nacional de Abarroteros Mayoristas (ANAM).
Con 146 empresas asociadas y 3 mil 500 proveedores, la organización cerró 2019 con un crecimiento de 7.3 por ciento en el valor de sus ventas, lo que supera el 5.4 que alcanzó Walmart, considerada la principal compañía dedicada al mercado minorista en el país.
Los comerciantes de la ANAM cuentan con 635 mil puntos de venta al menudeo en todo el país, la mayoría tienditas o misceláneas, y sus ventas del año pasado sumaron 199 mil 174.9 millones de pesos en conjunto. Walmart, que al 31 de diciembre llegó a 2 mil 571 sucursales –79 por ciento Bodegas Aurrerá–, registró 73 mil 652 millones en ventas, lo que equivale a 37 por ciento de dicha asociación.
Sin embargo, en cuanto a volumen (cajas de mercancía comercializadas), las ventas de la ANAM sólo aumentaron 1.4 por ciento anual. Así, Iñaki Landáburu admitió que el crecimiento de las ventas de su gremio puede atribuirse más a la inflación registrada en alimentos y otros productos básicos que comercializan, mayor al 2.83 por ciento que alcanzó la inflación general.
Los datos de los abarroteros mayoristas no se toman en cuenta en las estadísticas oficiales, pese a que los socios de la ANAM concentran casi la mitad del comercio de abarrotes en el país, aportan 0.91 por ciento del producto interno bruto nacional y 5 por ciento del sector comercio, pondera el dirigente empresarial.
Además, en años recientes el gremio ha ganado nuevos clientes debido a la cobertura y penetración que ha logrado tener en todo el país, ya que llega a zonas rurales tan alejadas y marginadas, incluso asoladas por la inseguridad y el crimen organizado, donde no se aventuran a entrar cadenas de supermercados.
Empresas de cosméticos, lácteos o alimentos frescos, como productos de salchichonería e incluso de frutas y verduras, han optado por recurrir a los asociados de la ANAM para extender la venta de sus productos, aseguró Landáburu.
Muchos productos o presentaciones que fabrican nacen a partir de las sugerencias y demanda de sus clientes minoristas, como las bolsitas de shampoo, los desodorantes pequeños o los paquetes de pasta y cepillo de dientes para viaje o emergencia, comentó en entrevista con La Jornada.
De cualquier manera, los comestibles se mantienen como el principal rubro del sector, ya que concentra 58.4 por ciento del valor de sus ventas, seguido por los productos de limpieza para el hogar (17.9 de participación), de papel (13.9), los de higiene personal (5.9) y para mascotas (3.9).