La Habana. Cuba no cumplió con los pagos de 2019 de su deuda renegociada con los países occidentales, una señal que pone en peligro un acuerdo con los acreedores del Club de París, dijeron diplomáticos.
El acuerdo de deuda, firmado en 2015 entre Cuba y los países miembros del Club de París, fue un paso importante hacia la reintegración de la isla a la comunidad financiera internacional. Diplomáticos sostienen que el incumplimiento de los pagos debería de llevar a sanciones severas.
El pacto, con 14 países, se firmó en un momento en que se iniciaba una breve distensión con Estados Unidos durante el gobierno del presidente Barack Obama.
El acuerdo es extremadamente beneficioso para Cuba y el hecho de que no puedan pagar dice mucho sobre la situación de escasez que atraviesa el país", dijo un diplomático con conocimiento del asunto.
Los diplomáticos señalaron que el viceprimer ministro Ricardo Cabrisas, negociador de la deuda de Cuba, se reunió el mes pasado en París con los acreedores y dijo que las nuevas sanciones de Washington contra La Habana, habían retrasado algunos de los pagos. El gobierno cubano no respondió a una solicitud de comentarios.
El acuerdo, visto por Reuters, perdonó 8 mil 500 millones de dólares de los 11 mil 100 millones de la deuda externa que la isla incumplió hasta 1986. La deuda restante se reestructuró hasta 2033 y parte de ese dinero se asignó a fondos para inversiones en Cuba.
Los intereses se perdonaron hasta 2020 y después sólo queda 1.5 por ciento de la deuda total pendiente, según establece el acuerdo que dice que si Cuba no cumple con un cronograma de pago anual en su totalidad, se cobraría un interés del 9 por ciento, más intereses atrasados.
Cuba debía desembolsar aproximadamente 80 millones de dólares el año pasado. Pagó a algunos países en su totalidad, pero no a otros incluidos España, Francia, Japón, según diplomáticos.
El gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reforzó el embargo comercial contra Cuba al anunciar nuevas sanciones enfocadas a la inversión, el financiamiento externo, el suministro de petróleo, el turismo y otras fuentes de ingreso.
Cuba informó por última vez que su deuda externa era de 18.200 millones de dólares en 2016. Expertos sostienen que aumentó.