Ciudad de México. Aves de presa fue la película más taquillera este fin de semana en las salas de cine de Estados Unidos. La obra de DC Comics recaudó 33.3 millones de dólares, según estimados de la industria difundidos el domingo.

La cinta llegó a las salas de cine en momentos en que su estrella, Margot Robbie, es una de las candidatas a un Óscar por su actuación en Bombshell.

Harley Quinn es un terrible modelo a seguir, aunque también puede ser inspiradora, bromeó la directora de la cinta Cathy Yan, también guionista y productora estadunidense de origen chino.

En una entrevista al diario inglés The Independent habló sobre ese personaje del universo cinematográfico de DC. Señaló que es una mar de contradicciones: fiestera, criminal, maníaca con un doctorado y una fijación por los payasos. Vive dentro de su propia cabeza, pero es sociable por naturaleza, relajada, pero podría romper las espinillas de un hombre en un instante.

En Aves de presa queríamos mostrar una versión diferente de la feminidad y el feminismo. Estas mujeres tienen defectos, toman malas decisiones, precisó Yan.

Luego de la Mujer Maravilla se siente bien que una película de comics mire más allá de una feminidad aspiracional, soltarse y renunciar a la carga de tener que servir de embajadora de un género.

En ese sentido, es muy radical. Con un presupuesto reportado de 75 millones de dólares, se trata de un proyecto apasionante para Robbie, quien pitcheó la película, supervisó su desarrollo y participó en la producción con su sello LuckyChap, junto con Warner Brothers. Ella presionó para que el estudio entregara las riendas a Yan, quien acababa de salir de su cinta debut, Dead Pigs.

Robbie mantuvo el tono inesperado de la cinta: inquietantemente violento en algunas partes, con muchas groserías, como Quentin Tarantino, pero nada de la melancolía de Guasón. Es graciosa e impredecible

Creo que había una especie de rebelión y un espíritu sin complejos con el que realmente estaba agradecida, sostuvo Mary Elizabeth Winstead, quien interpreta a Huntress. “Nunca vino alguien y dijo: ‘tal vez no deberíamos hacerla, porque quizás a alguien no le guste’, fue más bien como: ‘¿qué no gusta? ¿Qué se siente loco y catártico?’ No creo haber tenido nunca una experiencia como esa en una película de este tamaño”.

La primera idea que tuvo Robbie fue hacer una película de una banda de chicas, en 2015, mientras hacía Suicide Squad. Poco después, conoció a la guionista Christina Hodson, famosa por salvar ella sola la franquicia Transformers con el enternecedor Bumblebee. La pareja se llevó bien de inmediato. Me ganó su pasión y carácter, señaló.

Sin embargo, Helena está lejos de ser ruda. Winstead explicó que sus traumas han dado forma a su personalidad en una forma entrañable y divertida y dulce a veces, en medio de esta capa exterior de dureza y rabia.

Agregó: mientras la película avanza, ella empieza a mostrar sus rarezas en forma en que obtiene una reacción positiva de estas otras mujeres. Su trauma la ha hecho quien es, partes buenas y malas incluidas. Gracias a Aves de presa, se da cuenta de que no hay de qué huir.

Aunque los estudios han sido partidarios de contratar nuevos directores, éstos han sido casi exclusivamente hombres blancos. Yan, que es chinoestadunidense, está al borde de una nueva frontera.

“Es muy humillante, pero creo que lo que ayudó fue tener a Robbie, a Sue Kroll (productora) y las otras mujeres que abogaron por mí. Considero que también que fui una suertuda y buen timing.

Algo de locura y peligro

Hay algo de locura real en el mundo de Harley, pero también queríamos algo de peligro, aseguró Hodson. Una buena parte de eso vive en la transformación de Ewan McGregor, determinado a tomar el control de los bajos fondos de ciudad Gótica.

Para Winstead, trabajar en un set rodeada de tantas mujeres solas fue una revelación. No hay necesidad de defender tu posición como mujer, lo que es casi siempre el caso cuando trabajas alrededor de hombres en su mayoría, incluso si son encantadores, que ha habido.

Añadió: todavía hay una suerte de desconexión, como si tuvieras que hablar en otro idioma para traducirlo a la experiencia femenina . En Aves de presa no había esa desconexión. Estábamos juntas en esto y haciendo lo que queremos.

Winstead concluyó: Margot Robbie estuvo fuera, peleando para que la película pudiera hacerse hace cinco años y nadie la escuchó hasta que la marea comenzó a cambia.