Rabat. Miles de personas se manifestaron este domingo en Rabat contra el plan del presidente estadunidense Donald Trump para resolver el conflicto israelo-palestino, y llamaron a boicotear los productos estadunidenses.
Enarbolando banderas palestinas, los manifestantes marcharon por el centro de la capital de Marruecos gritando "¡Viva Palestina!".
En la marcha participaron simpatizantes islamistas, sindicalistas y políticos locales, que pidieron "boicotear los productos de Estados Unidos", considerados "enemigos de la paz".
"No a la normalización", "No al apoyo a la entidad sionista", gritaban los manifestantes, algunos de los cuales prendieron fuego a banderas israelíes. "¡Palestina no está en venta!", rezaba una pancarta.
Por otro lado, en Sfax, en el este de Túnez, también se celebró este domingo una manifestación contra la iniciativa estadunidense, convocada por la central sindical UGTT para denunciar un "acuerdo de la vergüenza".
El plan de Estados Unidos para Oriente Medio, presentado el 28 de enero por Donald Trump, prevé hacer de Jerusalén la "capital indivisible" de Israel, la anexión de colonias judías en Cisjordania ocupada y la creación de un Estado palestino desmilitarizado, conformado por el resto de Cisjordania y la Franja de Gaza.
El plan, juzgado demasiado favorable a Israel, fue rechazado por los palestinos.
Marruecos, un país aliado de Estados Unidos, "aprecia los esfuerzos constructivos de paz desplegados por la administración estadunidense actual para lograr una solución justa, duradera e igualitaria en Oriente Medio", reaccionó el ministro de Relaciones Exteriores marroquí, Nasser Bourita, al día siguiente de que se anunciara el plan, aunque reiteró el tradicional apoyo de Rabat a que el futuro Estado palestino tenga su capital en Jerusalén Este.
El sábado, Bourita se reunió en Amán con el presidente palestino, Mahmud Abas, y le reafirmó la posición de Marruecos sobre la cuestión palestina, según Rabat.
Marruecos no mantiene relaciones diplomáticas con Israel desde el cierre de la oficina de enlace israelí en Rabat, en 2000.