Ciudad de México. Lla Cámara de Diputados y el Senado lanzaron hoy sendos llamados a proteger a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), preservar su autonomía, resolver el conflicto sin violencia y atender las demandas de la comunidad, en específico las denuncias de acoso sexual contra las alumnas por parte de académicos.
El pleno de San Lázaro aprobó, tras un debate, un punto de acuerdo para expresar su preocupación por la suspensión de actividades en algunas instalaciones y planteles de la UNAM.
Asimismo, la Cámara expresó su rechazo a toda forma de violencia y exhortó a que se restablezcan las actividades lo más pronto posible.
También se manifestó por que “la comunidad universitaria y sus autoridades mantengan en todo momento la disposición al diálogo constructivo, inclusivo y abierto, que permita atender las denuncias y demandas legítimas de los estudiantes sobre prestación adecuada de servicios, garantizar la seguridad de la comunidad y el cese de la violencia de género”.
Y finalmente, que “el diálogo sea al mismo tiempo el instrumento necesario para normalizar las actividades académicas en la UNAM, patrimonio de los mexicanos”.
En tribuna, Pablo Gómez sostuvo que en la UNAM se hizo cotidiana la violencia de género y que la respuesta de las autoridades universitarias ha sido el silencio.
“Los directores no quieren funcionar como autoridades. por los motivos que sean. El asunto ha caído en un enorme vacío. La universidad sufre un vacío. Los actos de violencia den la universidad ocurren con cierta frecuencia, pero no son el problema; el problema es la violencia de género y llamamos a las autoridades a dar las respuestas correctas”, expresó.
El panista Marco Antonio Adame sostuvo que detrás del cierre de escuelas de la UNAM hay “agentes desestabilizadores”.
Luego de que la víspera el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que detrás del conflicto existe “mano negra”, Adame cuestionó: “¿Qué quiere decir con eso? Si hay mano negra o morena tiene que salir de la universidad".
"El Presidente está obligado a ordenar se investigue. Hay que proteger a la UNAM de cualquier atentado contra la autonomía universitaria y la seguridad de los universitarios”.
Incluso afirmó que en otros países “la agitación en las universidades es punta de lanza para la desestabilización”.
También en tribuna, Martha Tagle (MC) llamó a atender las demanda legítimas de la comunidad. “La violencia de género se reproduce en todo el país y la UNAM no es ajena a este fenómeno”, dijo.
Senado, por la razón y el diálogo
En tanto, la Cámara Alta condenó cualquier tipo de violencia en contra de las mujeres y de cualquier individuo de la sociedad y reprobó los recientes hechos en los que se vandalizó a la máxima casa de estudios y la toma de instalaciones de diversos planteles de la UNAM.
La presidenta de la mesa directiva, Mónica Fernández, dio lectura en el pleno al pronunciamiento que acordó la Junta de Coordinación Política (Jucopo). En el mismo se destaca que se reconoce y acompaña la exigencia de justicia de la comunidad estudiantil, refrendando su compromiso con la lucha por el respeto de sus derechos siempre en apego a la fuerza de la razón y el diálogo.
El Senado reafirmó el apoyo a las acciones de mesura y firmeza por parte de la Rectoría de la UNAM y llamó al restablecimiento del orden y legalidad en la máxima casa de estudios, al tiempo que solicitó a la comunidad “no caer en provocaciones” y a realizar las denuncias correspondientes para dar continuidad a la aclaración de todos los casos conforme a lo establecido en la normatividad universitaria y en la legislación correspondiente.
El pronunciamiento se emite considerando que desde noviembre del año pasado algunos planteles de la UNAM se encuentran en paro de labores exigiendo atención a los casos que se han suscitado de violencia contra mujeres, así como el cese de profesores señalados de acoso sexual por alumnas.
Dichos casos de violencia de género “han permeado en el ámbito de la sociedad poniendo en evidencia una realidad en la que los derechos de las mujeres son violentados de manera sistemática y, “la mayoría de los casos, sin sanción alguna”.
El pronunciamiento que aprobó el pleno de la Cámara Alta lo firman los coordinadores parlamentarios de Morena, del PRI, de MC, del PVEM, del PT, del PRD y del PES, así como la senadora Josefina Vázquez Mota.