Ciudad de México. El músico y compositor británico Ozzy Osbourne dijo que aun cuando en el último año ha afrontado numerosos problemas de salud, entre ellos su reciente diagnóstico de Parkinson, no le teme a la muerte, que ha pensado que le pasará, que le llegará la hora, pero no es algo que le preocupe.
“No estaré aquí en otros 15 años o lo que sea, no mucho más que eso, pero no me detengo en ello. Es algo que nos va a pasar a todos”, declaró el exvocalista de la banda Black Sabbath a la revista británica Kerrang!
Admitió no ser feliz en estos momentos porque no tiene salud, aunque todavía sigue con vida. Reconoció que cuando era joven le preocupaba más la muerte que ahora, que sólo trata de disfrutar las cosas lo más posible, aunque a veces sea tan difícil.
Este 2020 el rockero de 71 años tiene previsto regresar a los escenarios con presentaciones en Estados Unidos con su gira de despedida No more tours II, que comenzará el 27 de mayo en Atlanta, Georgia, y en Europa mantiene vigentes actuaciones, entre ellas un “show” en Madrid, España, el 22 de noviembre próximo.
También publicará el 21 de febrero próximo su nuevo álbum de estudio Ordinary man, que incluye colaboraciones con Slash, Elton John, Post Malone y Tom Morello. Cuenta además con la participación en el bajo de Duff McKagan, de Guns N’Roses, y la batería de Chad Smith, de Red Hot Chili Peppers.
Para el cantante la música es la mejor medicina que ha tenido y ello lo constató con la producción de este álbum, porque hizo algo que le gusta hacer.
En 2019 tuvo que posponer todas las fechas de su gira luego de caerse y lesionarse mientras se recuperaba de una neumonía.