Ciudad de México. El Banco de México anticipó el inicio de la recuperación económica durante el primer trimestre del presente año. Alejandro Díaz de León, gobernador de esa institución, se reunió el pasado martes, en privado, con los diputados de Morena, a quienes expuso que el entorno de tensiones comerciales, de desaceleración y producción en el país han generado una menor ocupación, mientras la inversión no ha crecido.
El encuentro entre el gobernador del Banco de México y la bancada mayoritaria en la Cámara de Diputados, fue el primero de ese tipo, y en su turno Alejandro Díaz adujo que con la caída en precios del petróleo en 2014, la contracción de la plataforma petrolera –la balanza comercial petrolera pasó del superávit a déficit-, la incertidumbre respecto al futuro del TLCAN (en su momento), y la normalización de la postura monetaria en Estados Unidos, “en este contexto, la economía mexicana ha mostrado una mayor debilidad en los últimos trimestres”.
Así, desglosó que las exportaciones manufactureras han venido mostrando “una pérdida de dinamismo, en congruencia con el entorno de tensiones comerciales y de desaceleración del comercio mundial”. También el “consumo privado ha mostrado cierta debilidad en los últimos trimestres. Con relación a la inversión prevaleció el desempeño desfavorable que este indicador ha venido registrando desde el segundo semestre de 2015 y especialmente desde inicios de 2018”.
En su exposición también abordó el mercado laboral, que “si bien la tasa de desocupación nacional registra niveles relativamente bajos, la urbana ha mostrado aumentos, mientras que la generación de empleos se ha desacelerado”.
A decir de Alejandro Díaz de León, “entre los factores que los empresarios y analistas consideran que podrían limitar el crecimiento destacan los relacionados con la gobernanza. En caso de tener avances en algunos problemas que por años han afectado a la economía, como el estado de derecho (corrupción, inseguridad e impunidad), se propiciaría un entorno que permitiría impulsar el crecimiento”.
Tras esas aseveraciones, sustentadas en la presentación ante los diputados, el gobernador del banco central emitió sus consideraciones finales: “la economía global se ha desacelerado; las condiciones financieras globales se han relajado; si bien las tensiones comerciales han disminuido, las geopolíticas se han incrementado recientemente; se espera que la actividad económica en México inicie su recuperación en el primer trimestre de 2020”.