Tapachula, Chis. Varios cientos de migrantes centroamericanos que se dispersaron como consecuencia de las acciones policiacas en los días recientes en la frontera del Suchiate, están llegando a los refugios ubicados en Tapachula, informó el sacerdote César Augusto Cañaveral Pérez, coordinador diocesano de la dimensión de pastoral humana en y director del albergue Belén.
“En menos de cuatro cinco días tenemos 500 personas que se han venido a alojar durante las 24 horas, a raíz de la desintegración de las caravanas. Teníamos una permanencia constante de entre 230 y 280 personas diarias durante todo el año, pero ahora se elevó el número porque al ser dispersados los migrantes tuvieron que buscar refugio; sólo ayer llegaron 120”, dijo en rueda de prensa.
Comentó que algunas indocumentados han llegado “lastimados o golpeados. Llegan mal no sólo física sino sicológicamente por lo que vivieron al enfrentarse con la Guardia Nacional”.
Aseguró que el asunto de los migrantes” ya se convirtió en una tragedia humana porque pareciera que fueran criminales. Me gustaría que la Guardia Nacional se confrontara con el crimen organizado. Los migrantes vienen con una necesidad y México no está respetando el derecho de tránsito en el país”.
Cañaveral Gómez pidió al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador que diseñe “una política migratoria clara porque no la tiene, sino que es ocurrencias, lo que ha dañado mucho. Es uno de los peores gobiernos entorno a la migración porque hay un rechazo, lo que ha ayudado a que la sociedad criminalice a los migrantes”.
-¿Reprueba la actitud del gobierno de López Obrador? –le preguntó un reportero.
-Cien por ciento la repruebo porque está actuando peor que el de Estados Unidos.
José, uno de los jóvenes que evadieron las acciones de la policía el pasado lunes en el río Suchiate y que logró llegar al albergue Belén, contó que salió el 15 de enero de Honduras con un grupo de varios miles. “Nos vivimos de aventón y caminando hasta llegar a Tecún Umán, Guatemala. Como no nos abrieron el paso (en la frontera de México), el 17 de enero nos cruzamos el río; nos estaba esperando la Guardia Nacional, pero logramos pasar muchos”.
Comentó que junto con otros 800 migrantes que se reagruparon tras burlar el cerco policiaco, caminaron sobre la carretera Ciudad Hidalgo-Tapachula, pero a los pocos kilómetros aparecieron los uniformados; los que no fueron detenidos se dispersaron entre platanares y potreros.
En la madrugada del martes tomaron una combi colectiva y llegaron a Tapachula ese día. “Ya estamos aquí gracias a Dios y ya tramitamos un permiso; estamos esperando respuesta para que nos den un trabajo”
Luis García Villagrán, del Centro de Dignificación Humana informó a su vez que el Juzgado Tercero de Distrito, con sede en Tapachula, concedió la suspensión provisional en favor de mil 118 migrantes centroamericanos detenidos el jueves por agentes de la Instituto Nacional de Migración (INM) y de la Guardia Nacional para evitar su deportación.
“Más de 800 migrantes están en la Estación Migratoria Siglo 21 o en otro lugar y si algunos ya fueron deportados y estaban en la lista que enviamos al juez las autoridades han cometido un verdadero agravio en contra de una autoridad federal”, dijo.
Señaló que la solicitud de amparo fue interpuesta ayer a las 11.51 y la notificación del juez llegó diez minutos después. El juez nos concedió la suspensión del acto reclamado de premura urgencia. Ya fue notificado vía estrados. El amparo es contra detenidos, incomunicados y quejosos”.
