Ciudad de México. La baja en la producción y exportación de vehículos de transporte se prolongó a noviembre, reportó la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) y atribuye ambas situaciones a la “incertidumbre jurídica” que acarrean regulaciones ambientales publicadas hace dos años.
En ese mes la maquila alcanzó un total de 12 mil 972 unidades, lo que representa una caída de 17.6 por ciento, respecto al mismo mes de 2018, mientras la comercialización hacia el extranjero resultó en 11 mil 869 unidades, una disminución de 4.2 por ciento, con relación al mismo mes de 2018.
No obstante, contrario al desplome en toda la industria automotriz en 2019, de la que ya dio cuenta el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, las cifras reportadas por Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones exhiben que durante los primeros 11 meses del año pasado se produjeron 188 mil 794 unidades, cifra que incrementó 16.2 por ciento respecto a 2018.
Lo mismo en exportaciones que llevan un total de 159 mil 629 unidades, lo que significa un aumento de 17.5 por ciento respecto a 2018.
Pese a que en el acumulado, la ANPACT reporta incrementos de doble dígito, atribuye la desaceleración de los últimos meses a la “incertidumbre jurídica” de normas ambientales que exigen a la industria producir exclusivamente vehículos que utilicen diésel ultra bajo en azufre, pese a que no hay garantía para su abasto.
“El diésel limpio sólo es obligatorio en 18 por ciento de los municipios del país y Petróleos Mexicanos (Pemex) lo abastecerá en su totalidad hasta enero de 2025. La incertidumbre está forzando a los transportistas a suspender la renovación de sus vehículos, lo que va a incrementar la edad promedio de la flota, que es de 18 años. Inevitablemente, no ajustar la norma de producción de vehículos a la disponibilidad real del diésel limpio elevará las emisiones”, consideró Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la ANPACT.
El tema ha sido reiterado por la asociación, quiere que sus integrantes sigan fabricando con las misma tecnología -que no exige duba- hasta 2024, cuando Pemex garantice el abasto.
La "incertidumbre jurídica" que acusa la ANPACT proviene de la NOM-044-SEMARNAT-2017 que se publicó hace casi dos años en el Diario Oficial de la Federación para entrar en vigor hasta 2021.