Londres. La mayoría de las personas en el mundo considera que el capitalismo en su forma actual está haciendo más daño que bien, de acuerdo con una encuesta llevada a cabo antes de la reunión de líderes empresariales y políticos de Davos de esta semana.
Este año es la primera ocasión en que el Barómetro de Confianza Edelman, que durante dos décadas ha encuestado a decenas de miles de personas sobre su confianza en las instituciones centrales, trató de comprender cómo se veía el propio capitalismo.
Los autores del estudio dijeron que los sondeos anteriores, los cuales mostraban un creciente sentido de desigualdad, los llevaron a preguntarse si los ciudadanos estaban comenzando ahora a tener dudas más fundamentales sobre las democracias capitalistas de Occidente.
La respuesta es sí
, expresó David Bersoff, investigador principal del estudio, que es generado por la agencia estadunidense de comunicaciones Edelman.
La gente se pregunta a ese nivel si lo que tenemos hoy, y el mundo en que vivimos actualmente, está optimizado para que tenga un buen futuro.
El sondeo, en 28 países
La encuesta se aplicó a más de 34 mil personas en 28 países, desde democracias liberales occidentales, como Estados Unidos y Francia, hasta aquellas basadas en un modelo diferente, como China y Rusia, con 56 por ciento de acuerdo en que el capitalismo, tal como existe hoy, hace más daño que bien en el planeta
.
A escala nacional, la falta de confianza en el capitalismo fue mayor en Tailandia e India con 75 y 74 por ciento, respectivamente, con Francia muy cerca de 69 por ciento. Las mayorías prevalecieron en otros estados asiáticos, europeos, del Golfo, africanos y latinoamericanos.
Únicamente en Australia, Canadá, Estados Unidos, Corea del Sur, Hong Kong y Japón las mayorías entrevistadas no estuvieron de acuerdo con la afirmación de que el capitalismo hace más daño que bien actualmente.
El sondeo confirmó preocupaciones familiares, que van de asuntos sobre el ritmo del progreso tecnológico y la inseguridad laboral a la desconfianza de los medios y la sensación de que los gobiernos nacionales no estaban a la altura de los desafíos de la actualidad.