Suchiate, Chis. Alrededor de dos mil migrantes centroamericanos arribaron esta mañana al puente internacional Rodolfo Robles, ubicado sobre el río Suchiate, para pedir al gobierno de México que les permita ingresar al país, con el objetivo de llegar a la frontera norte.
Al llegar a las 5:00 horas, tiempo local, a la reja de entrada a México entregaron un documento a las autoridades federales, bajo la propuesta de que esperarán tres horas la respuesta oficial.
“Creemos en Dios que el presidente (Andrés Manuel) López Obrador nos dirá que sí, primero Dios”, dijo uno de los representantes de los indocumentados.
El grupo, que llegó muy tranquilo, se encontró con decenas de agentes de la Guardia Nacional con equipo antimotines que les impidieron el paso.
El contingente avanzó a partir de las 4:00 horas desde la fronteriza ciudad de Tecún Umán, donde pernoctó dos noches.
Antes de salir los centroamericanos, hondureños, principalmente, hicieron una oración y después de exclamar “en el nombre de Dios” contaron hasta tres e iniciaron la caminata hasta el puente, donde el gobierno mexicano colocó bocinas desde ayer para exhortarlos a que no ingresen ilegalmente.
Las autoridades federales cerraron las oficinas aduanales ubicadas en la zona del puente y suspendieron todos los servicios, por lo que no permiten el paso de personas, ni vehículos.