Des Moines, Iowa. El séptimo debate demócrata que reunió este martes a seis precandidatos inició centrado en la lucha entre el favorito, el ex vicepresidente Joe Biden y el senador progresista Bernie Sanders, que le pisa los talones en las encuestas y que cuestionó sus decisiones en política exterior cuando estaba en el Congreso.
Además se habló de la política exterior, el rol de las tropas estadunidenses desplegadas en el mundo, en un momento en que las tensiones entre Irán y Estados Unidos genera preocupación.
Biden, vicepresidente durante el gobierno de Barack Obama, llegó como favorito, con 28 por ciento en las encuestas nacionales, seguido por el senador Bernie Sanders, con 20 por ciento, y la senadora Elizabeth Warren con16 por ciento, según el compilado de encuestas RealClearPolitics (RCP).
"Como nación tenemos que enfrentar el hecho de que los dos más grandes desastres de esta era en política exterior, la guerra de Vietnam y la guerra de Irak, estuvieron basadas en mentiras", dijo Sanders, quien comentó que temía que las tensiones con Irán terminaran en otro conflicto de este tipo.
Sanders recordó que en 2002 votó contra la guerra en Irak, mientras que Biden tuvo que explicar nuevamente por qué dio su beneplácito a esa intervención militar, intentando eludir la respuesta diciendo que su hijo, ya fallecido, sirvió como militar.
Además recalcó que fue el gobierno de Obama quien impulsó el acuerdo nuclear con Irán, un pacto multilateral del cual el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se restó.
La campaña partió con una cantidad récord de aspirantes para ser el contendiente demócrata que se enfrente a Trump, en los comicios de noviembre, pero sólo seis candidatos clasificaron para subir este martes al escenario en la Universidad Drake, en Iowa.
Los otros participantes fueron el ex alcalde de South Bend Pete Buttigieg, la senadora Amy Klobuchar, el millonario Tom Steyer, que tienen menos de 7.5 por ciento de preferencias..