Ciudad de México. Al no prosperar la venta del avión presidencial en Estados Unidos, el gobierno mexicano regresará la aeronave a territorio nacional, una vez que concluya su proceso de mantenimiento y certificación.
El presidente Andrés Manuel López Obrador señaló tres opciones sobre el TP-01 una vez que regrese a México: venderlo a un solo comprador; que sea una venta compartida -hay una propuesta que incluye a 12 empresas- o rentarlo por hora. El avión presidencial será resguardado por la Fuerza Aérea Mexicana.
En su conferencia de prensa en Palacio Nacional, el mandatario descartó que haya fracasado la venta de la aeronave . “No, es que es complejo y no queremos malbaratarlo. Mejor esperar”. También rechazó que regresarlo signifique un gasto mayor.
Manifestó que hasta ahora se han erogado 30 millones (de pesos) para el mantenimiento del avión en Estados Unidos.
Recordó que sólo en un viaje en ese avión a Argentina en el sexenio de Enrique Peña Nieto se gastaron siete millones de pesos y “agreguen botellas de agua, gel, corta uñas... son los 30 millones en ese viaje, si a esas vamos”, expresó.
López Obrador señaló que continúan viendo con el gobierno de Estados Unidos la posibilidad de que lo adquieran, “pero no hemos tenido respuesta”. Planteó: “Les entregamos el avión, paguemos en especie: necesitamos rayos X, ambulancias, laboratorios... Pero ya tomamos la decisión de promoverlo”.
El costo mínimo de la aeronave son los 130 millones de dólares establecidos en el avalúo. En 2012 había costado 218 millones de dólares.
El presidente explicó que se decidió mandar el avión a California porque “es donde se le da el mantenimiento y es donde por lo general se venden estos aviones”. Pero termina el mantenimiento, “se hace una certificación y regresa a México. Los técnicos dicen que hace falta terminar con proceso de certificación y regresa a Mexico, al hangar presidencial o Santa Lucía, mientras se lleva a cabo cualquier de las acciones:
“Primero, que continúe el proceso para que se encuentre el comprador; segundo, que sea una venta compartida, no lo descartamos, y nos gustaría que fueran empresas mexicanas. Hay una propuesta de vender a 12 empresas para que el costo sea menor y que lo puedan utilizar para viajes de sus ejecutivos como reconocimiento por el trabajo que lleven a cabo”.
Si el avalúo es de 130 millones de dólares, consideró que serían como 11 millones de dólares por empresa.
La tercera posibilidad es la renta por hora del avión, que estaría bajo el control de la Fuerza Aérea Mexicana.
Por su parte, tras anunciar la subasta de 28 aeronaves -19 aviones y nueve helicópteros de siete dependencias- a través de una convocatoria que estará abierta desde hoy y hasta el 31 de enero, Jorge Mendoza, director de Banobras, explicó que en California, la ONU identificó 42 potenciales compradores del TP-01. De ellos, 12 presentaron propuesta económica, pero sólo hubo dos potenciales compradores. “Presentaron posturas por encima de avalúo, pero ninguna ha prosperado en la formalización de la compra”.
Recordó que el avión lo compró Banobras en 2012 –al final del sexenio de Felipe Calderón- y lo arrendó al gobierno federal por 218 millones de dólares.
A su vez, el general Manuel de Jesús Hernández González detalló que hasta ahora se han destinado 13 millones de pesos para la conservación del avión presidencial y 15 millones para su mantenimiento en California.