Bavispe, Son. Al dar su balance del encuentro privado sostenido por el presidente Andrés Manuel López Obrador con los deudos directos, Adrián LeBarón demandó que la masacre donde perdió la vida su hija no convierta en fantasma a los pueblos de Sonora. Desde el paraje donde murió calcinada Ronhita LeBaron, demandó justicia.
De acuerdo a Julián LeBarón, en los reportes que les han entregado de las investigaciones realizadas por la Fiscalía General de la República están involucradas al menos 40 personas aunque hay detenidas siete personas en México y dos más en Estados Unidos.
"Vine a este lugar donde calcinaron a mi hija que la justicia está caminando y que buscamos justicia para el país" dijo Adrián LeBarón, quien consideró que en el encuentro percibieron un "presidente empático, sensible, solidario". En este contexto lanzó la convocatoria para participar en la marcha convocada para el próximo día 23. "No somos enemigos, si el dolor nos encontró que la esperanza nos una".
Al concluir el evento público, la familia LeBaron realizó un recorrido por la ruta de la masacre ocurrida el 4 de noviembre en la que perdieron la vida tres mujeres y seis niños. Desde la casa de Ronhita LeBaron Miller quien en aquella ocasión salió a las diez de la mañana con rumbo a Arizona para ir por su esposo por el camino de terracería donde fue ejecutada.
En el lugar, aún se encuentran las cintas amarillas colocadas por la autoridad para "resguardar" la escena del crimen. Ahí colocaron una ofrenda floral y condenaron la violencia que campea en todo el país y la inoperancia de las corporaciones policiacas . "Con mi hija hubo un crimen de omisión", dijo Adrián LeBarón al referirse a la negligencia con que actuaron en aquella ocasión las autoridades estatales y federales, pues tardaron diez horas en llegar.