Un diálogo intercultural, en el que confluyen rituales, plegarias y sabiduría milenaria, se descubre en el catálogo Grandes maestros del arte wixárika, acervo Juan Negrín.
Esta publicación recoge obras de arte moderno wixárika y textos que profundizan sobre esa colección. Fue presentada en el Museo Cabañas, recinto que aloja desde junio de 2019 la exposición de título homónimo.
La muestra, que consta de 84 obras, concluye este fin de semana después de haber sido pospuesto su cierre dos meses, debido al éxito que obtuvo.
Desde su arranque, hasta estos primeros días de enero, ha recibido casi 63 mil personas.
Entre las piezas expuestas sobresalen textiles, esculturas y tablas de estambre de gran y mediano formatos realizadas por artistas wixaritari, las cuales abonan a la preservación y difusión de esta cultura a partir de sus protagonistas.
Así, el catálogo es una evidencia de un diálogo intercultural.
En esta edición se constata la riqueza milenaria de una comunidad que en sí misma es patrimonio cultural, pero también es productora de arte. Su lengua, su territorio y sus prácticas están reflejados en las obras de José Benítez Sánchez, Tiburcio Carrillo Sandoval, Guadalupe González Ríos, Lucía Lemus de la Cruz, Juan Ríos Martínez y Pablo Taizán de la Cruz.
Todas ellas forman parte del acervo, de más de 150 piezas, que pertenecieron al filósofo Juan Negrín, las cuales quedaron en manos de su hija, Diana Negrín da Silva, curadora de la exposición en el recinto jalisciense.
Con textos de especialistas sobre pueblos originarios como Guillermo de la Peña, Patricia Díaz Romo, Ingrid Arriaga y Aukwe García Mijarez, cada página está inundada de colores y movimiento.
El lector conocerá la cosmovisión de este pueblo originario, pero también la visión individual de quienes lo conforman.
Lo sagrado, elemento de la naturaleza
Giovana Jaspersen García, titular de la Secretaría de Cultura de Jalisco, explicó: “El arte wixárika no marca distancia con la cotidianidad de los creadores; desde el colectivo, el pueblo es, de alguna forma, una población de artistas anónimos.
Retienen lo sagrado en su ropa y en las fiestas; sus piezas van más allá de lo estético e incluso de lo artesanal. Lo sagrado es casi un elemento más de la naturaleza, una extensión de su humanidad que en todo va inscrita.
Esta publicación, dijo la funcionaria, se convierte en un insumo importante del trabajo que encabeza esta dependencia para que, desde una cultura con enfoque integrador, se forje un futuro donde se escuchen la diversidad de voces, sabiendo que en Jalisco las diferencias de su gente son riqueza y patrimonio
.
Juan Negrín fue un filósofo y artista, que en 1970 visitó una exposición de cuadros elaborados por artistas wixaritari afuera de la Basílica de Zapopan.
Años después, Negrín, acompañado de su esposa Yvonne Marie da Silva, tejió lazos de amistad y colaboración con cinco artistas wixaritari y sus familias, viajando con ellos por su territorio, enfocándose en el acompañamiento de la defensa del territorio, los bosques y en la promoción de sus manifestaciones artísticas.
Durante 44 años, la pareja abrió canales comerciales para que las comunidades wixárika pudieran vender su obra en todo México y el extranjero.
Ellos fomentaron la autonomía a través de la apertura de talleres donde los wixaritari desarrollaran sus productos artísticos.
Asimismo, Negrín se convirtió en unos de los primeros coleccionistas de tablas de estambre y figuras con chaquira, entre otras piezas.
El catálogo Grandes maestros del arte wixárika, acervo Juan Negrín, escrito en tres lenguas –español, inglés y wixárika–, fue auspiciado por la Secretaría de Cultura de la entidad, la Fundación Alejandro Díaz Guerra, la asociación civil William R. Hearst II y el Instituto Zacatecano de Cultura.