El Departamento de Defensa de Estados Unidos confirmó el ataque que perpetraron fuerzas iraníes contra sus tropas radicadas en dos bases militares de Irak y anunció que evalúa su respuesta.
Bases militares iraquíes que alojan a uniformados estadounidenses, ubicadas en las ciudades de Al Anbar y Erbil, fueron golpeadas por más de 12 cohetes de Irán, acusó en un comunicado la dependencia de la administración Trump.
El Pentágono anunció que trabaja en la evaluación inicial de los daños producidos durante el ataque y que desde los últimos días ha respondido a las amenazas con todas las medidas necesarias para salvaguardar a su personal y el de sus aliados.
“Estas bases han estado en alerta máxima debido a los señalamientos del régimen iraní de que planeaba atacar nuestras fuerzas e intereses en la región”, señaló la defensa de